Mariquitas, ranas y ajedrea para combatir plagas

La Voz

A MARIÑA

24 sep 2016 . Actualizado a las 05:00 h.

Mientras se termina el nuevo centro, los siete alumnos de la tercera promoción de la escuela de agricultura ecológica continúa su formación. Si los doce alumnos de la anterior hornada se centraron en el cultivo del tomate, testando más de setenta variedades diferentes para ver cuáles eran las más idóneas para cultivar en la zona. En esta edición se están centrando en la lucha biológica contra las plagas que afectan a los cultivos.

En los invernaderos dedicados a monocultivo se mezclan ahora especies distintas, introduciendo plantas aromáticas, como la ajedrea, que ahuyenta el pulgón de las judías, o el perifollo, que protege la lechuga.

Ranas, mariquitas de siete y de dos puntos son especies que están usando contra las plagas. El responsable de la escuela, Pedro Luis Fernández explica que las larvas de las mariquitas son depredadoras efectivas contra los pulgones, una larva se come hasta 600. Encontraron también macrolophus, un insecto, un chinche depredador eficaz contra la mosca blanca. Y para combatir el tuta absoluta, que afecta a los tomates, utilizaron Bacillus thuringiensis. Fernández explica que se dejan crecer las plantas afectadas por algún tipo de agresor con las sanas para ver cómo evolucionan los tratamientos.

Esta labor formativa se compaginó este año con los trabajos de la nueva puesta en marcha de los invernaderos (limpieza, preparar el terreno, elaboración de semilleros); estuvieron más tiempo parados que otras ediciones por mor de los trabajos del nuevo centro de formación que esperan estrenar el próximo curso.

Cultivan tomate, pimiento, pepino, calabacines, calabaza de peregrino, calabaza de guernica y varios tipos de judía, sobre todo para observar la afección del pulgón. Fernández destaca que los alumnos, cinco mujeres y dos hombres de los concellos de O Valadouro, Alfoz y Barreiros, «trabajan bien». Acerca de las perspectivas que tienen en la rama de agricultura ecológica, una vez finalicen el curso el próximo 31 de diciembre, señala que «hai respeto y miedo a invertir».El año pasado algunos alumnos dieron el paso, poniéndose al frente de explotaciones de agricultura ecológica.