En uno se llevaron dinero de la tragaperras; en otro se fueron de vacío
13 sep 2014 . Actualizado a las 07:05 h.os cacos estuvieron de ronda por Viveiro en la noche del jueves al viernes. Al bar Luar, situado en las galería de la Avenida Benito Galcerán, frente al asilo, entraron a través del hueco abierto en la cristalera que da al pasillo, que rompieron con un trozo de plaqueta de la acera que llevaba tiempo desprendido.
El dueño del bar cree que ocurrió entre la una y la una y media de la madrugada. Al menos, a esa hora oyeron ruido algunos vecinos. No era una hora demasiado tardía y ellos habían cerrado el establecimiento no mucho antes, a las 23.45 horas. Suponen que los ladrones estarían vigilando para ver cuando se marchaban y entrar ellos, si es que fueron varios. Cuando se percataron de lo ocurrido fue a las siete de la mañana, cuando acudieron a abrir.
Una vez dentro, reventaron la tragaperras para extraer el dinero que tenía en la parte inferior. Según el afectado, calcula que habría unos 800 ó mil euros, aunque la cantidad debía de determinarla hoy el propietario de la máquina. Se llevaron también un sobre que contenía algún dinero y que un cliente había dejado allí para que lo recogiera otra persona.
A todo ello hay que sumar los 1.500 euros que valdrá reponer la luna, más los daños de la tragaperras.La hipótesis que, al parecer baraja el Cuerpo Nacional de Policía, que es quien se ocuoa de investigar este robo, es que se trata de gente de la zona que ya actuó en los días pasados en locales de Cantarrana.
En el establecimiento ya habían robado en otras dos ocasiones, pero tiempo atrás, hace unos siete y doce años. El propietario lo tenía medio olvidado, pero se lo han hecho recordar de nuevo los delincuentes.
El otro robo se perpetró en el Bar Avenida, en la Travesía da Mariña. Era la una de la madrugada cuando la responsable del local fue alertada por agentes de la Comisaría de Policía de Viveiro de que tenía un cristal del establecimiento roto.
Efectivamente, los ladrones fracturaron la parte inferior del cristal de una ventana para entrar al interior. «Non sei como non se cortaron ao pasar por debaixo dos picos do cristal», señalaba ayer, indicando que habían dejado muy poco hueco y que está «asustada de pensar que pasaron por aí».
Fue un robo inútil, porque del bar apenas se llevaron unas pocas monedas. No llegaría el botín ni a cinco euros. Señala la afectada que no se explica como eligieron el local, dado que ni siquiera tienen máquina de tabaco ni tragaperras y nunca dejan dinero dentro. También le «amilagra» que «non moveron nada do sitio, nin siquiera unha botella».
En resumen, que lo más grave es el daño del cristal, pero tenía seguro y ya se lo repuso el cristalero ayer mismo. Tampoco se olvidó de los agentes de la Comisaría de Viveiro. Dice que su atención fue «extraordinaria», que la estuvieron acompañando mientras intentaba localizar un cristalero, ayudándole. «Quixen poñerme en contacto cos da Policía Local para ver si me conseguían un cristalero, pero saleume un contestador dicíndome que e puxera en contacto cos da Policía Nacional. Eu sempre defendo moito a esta xente», recalcó.