El mitrado dice que eligió Mondoñedo para censarse por ser la sede más antigua y por tener menos población
26 sep 2016 . Actualizado a las 05:00 h.El claretiano Luis Ángel de las Heras era ordenado obispo de Mondoñedo-Ferrol el pasado 8 de mayo. Durante el acto destacaron su juventud y su carisma misionero. Según el mandato del Papa Francisco, fue elegido por su experiencia pastoral y educativa.
-Desde que llegó no ha parado.
-No he parado, ha sido todo muy interesante, muy intenso (...). Ha habido mucha actividad.
-¿Es lo que se esperaba o se ha llevado sorpresas?
-Bueno, yo no me había hecho ninguna idea, excepto que me decían que los gallegos erais buena gente y he comprobado que hasta ahora es verdad. Yo me he sentido a gusto, he tenido una acogida muy buena por parte de todo el mundo y he descubierto sorprendentemente unas comunidades cristinas con vigor y ganas de trabajar. También hay dificultades, pero no he encontrado una sorpresa que me haya descolocado (...). Aparte, la belleza de los paisajes es algo que todo el mundo que ha venido a verme, compañeros de Madrid y alrededores, todos están deslumbrados por la belleza paisajística de la diócesis.
-¿Ya puede hacer de cicerone?
-De algún sitio si, la playa de las Catedrales enseguida te la enseñan, pero los acantilados de Cariño en San Andrés de Teixido, allí he llevado ya a bastante gente, porque como dicen que había que ir de vivos, si no tienes que ir de muerto, dije, voy de vivo y los que me acompañaron también.
-¿A las Catedrales fue usted?
-Fueron a enseñármela, yo no he llevado a nadie todavía.
-Por lo que veo son los lugares que más le han sorprendido.
-Los que más he visitado. Hay también en Cedeira una ermita, la de San Antón, con un paisaje precioso. Y la procesión marítima de Cedeira, en agosto, también ha sido un momento muy especial porque yo nunca había estado en una procesión marítima.
-Tiene que ir a la de Burela.
-Eso me han dicho, pero coincidió mal y no podía ir, tampoco pude ir a la de Viveiro-Celeiro. Habrá tiempo...
-Se ha censado en Mondoñedo.
-Si. Me parecía que era normal censarse en Mondoñedo o en Ferrol, pero me parecía mejor en Mondoñedo, que es la sede más antigua de la diócesis y además, tiene menos población... Uno más, me dijeron. El certificado de empadronamiento me lo cobraron como todo hijo de vecino, no pienses que me lo regalaron.
-Está bien que no haya tratos de favor.
-No hubo, no, me cobraron lo que cobran a todo el mundo.
-¿Cómo ha visto la diócesis en cuestiones sociales?
-A través de Cáritas he visto una problemática que es el paro y la gente que vive sola. No me sorprendió, pero me inquieta; hay mucha gente que va a desayunar a Cáritas Ferrol, eso me ha llamado la atención. La cantidad de comidas que están dando en muchas Cáritas y parroquias es un indicador de la necesidad que hay en toda España. Luego la gente del mar me ha expresado la necesidad que tienen para poder vivir un poco mejor y trabajar en mejores condiciones; eso también ha sido muy sorprendente. Yo no había conocido a la gente del mar, me parece relevante que tengan unas condiciones de trabajo mejores.