«Que nos tallen bien importa más, pero mejor no estrenar calzado y que sea de piel, y suela gruesa»

La Voz

A MARIÑA

CEDIDA

06 abr 2017 . Actualizado a las 05:00 h.

Nació en O Vicedo, pero se declara «viveirense de adopción y de sentimiento». Buena prueba es que desde principios de siglo ha sido uno de los llevadores del paso más pesado de la Semana Santa de Viveiro, El Calvario, que desde el 2002 portan 105 personas en parte de su trayecto. Por una lesión en una rodilla, Jacobo Fouz Vázquez dejó de portar esa imagen el año pasado. Podólogo de profesión, con clínicas en Viveiro, Ribadeo, A Coruña y Santiago, además de trabajar en el coruñés Instituto Arriaza, Jacobo Vázquez comparte las recomendaciones del Colexio de Podólogos de Galicia (él mismo editó el año pasado un díptico con consejos), pero las contextualiza porque «la Semana Santa de Viveiro está muy bien organizada, y aquí los llevadores no se juntan de un día para otro y dicen ‘venga, vamos a llevar esa imagen’».

-¿Qué quiere decir?

-Claro que cuidar los pies es conveniente, pero cargar una imagen sobre los hombros repercute más en la columna y en las rodillas que en los pies. Porque es mejor prevenir, si una persona está lesionada o tiene algún problema lumbar o de rodilla, no es aconsejable que lleve ninguna imagen. Con buena salud y una forma física normal, para los llevadores importa más que nos tallen bien y que son sitúen bien, con personas de alturas similares. El mérito es de quien nos talla y nos coloca debajo del paso, de quien procura que hagamos las paradas que tocan; por eso las procesiones de la Semana Santa de Viveiro se llevan bien.

-¿Entonces no suele haber muchos problemas con los pies?

-¿Por las procesiones? Poquitos, algunas por uñas mal cortadas que rozan con los dedos, algunas ampollas y, en los penitentes que van descalzos, cortes, que pueden ser algo más serios.

-¿Cuál puede ser el calzado más recomendable?

-Aunque no es tan poco habitual, lo mejor para los llevadores es no estrenar calzado, llevar uno ya ablandado, de piel natural y con suela gruesa y flexible. También deben evitarse tacones de más de cuatro centímetros, punteras duras o puntiagudas yhan de adaptarse al pie e ir bien sujetos. Calcetines o medias, mejor sin costuras y de fibras naturales.