Un incendio calcina una casa en Lourenzá y deja a la familia que lo habitaba con lo puesto

Un incendio calcinó en la noche del viernes al sábado buena parte de una casa en la zona de Pontigo (Santo Tomé de Lourenzá). Los habitantes de la casa, un matrimonio y un hijo de pocos años se encontraban fuera en el momento de iniciarse el fuego. Parece que fue algún vecino el que se percató de lo que estaba ocurriendo y avisó a las casas cercanas. Algunos testigos presenciales destacaron, precisamente, la actuación que tuvo la gente del lugar, ya que fue la primera en actuar, utilizando el agua de un regato cercano para intentar frenar el avance de las llamas.

Los bomberos de Barreiros, el GES de A Pontenova, Protección Civil de Lourenzá y Guardia Civil acudieron también al lugar, al igual que la alcaldesa de Lourenzá, Rocío López.

Todo apunta, según algunas fuentes, a que el fuego se inició en un local anexo a la casa y desde allí se extendió a la planta baja de la vivienda, que quedó completamente arrasada, bien por las llamas o bien por las altas temperaturas, como ocurrió, señalaron, en la parte de la cocina. La primera planta quedó mejor parada. La habitación principal es la que se vio más afectada y el resto de las dependencias fueron dañadas por el humo y los gases.

De hecho, los bomberos de Barreiros tuvieron que volver ayer por la mañana al lugar para apuntalar el debilitado suelo para que la familia pudiera entrar a salvar las pocas pertenencias que quedaron sin arder, sobre todo ropa de los armarios, que les ayudaron a sacar.

Nadie confirmó cuáles pudieron ser las causas que originaron el incendio. Se hablaba de un posible cortocircuito, pero es una teoría sin confirmar.

La familia afectada, que llegó a la casa al poco rato de detectarse el incendio, fue acogida en casa de unos vecinos con los que al parecer, tiene una buena amistad.

Desde el Concello, la alcaldesa local enviaba ayer a los damnificados todo su apoyo.

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