En mayo, apareció una culebra en el caño de una fuente del centro de Viveiro
23 jun 2017 . Actualizado a las 05:00 h.El Sergas asegura que ni en el Hospital da Costa ni en los centros de salud mariñanos han atendido estos días casos de mordeduras de víboras o de culebras. Eso no impide que sea una temporada en la que se suceden los avistamientos de serpientes en zonas próximas a casas. Entre los últimos casos que han trascendido figura el de Diego, un vecino de A Rigueira (Xove), que se encontró con dos culebras con pocos días de diferencia.
Fue su perro el que cazó el primer ejemplar, de unos 50 centímetros de longitud. Temiendo que fuera venenosa, Diego recogió el ejemplar, lo metió en un recipiente y lo llevó a una clínica veterinaria, donde le indicaron que era una culebra de agua y que no representaba ningún riesgo para su mascota. Pocos días después, los ladridos de los perros le alertaron de la presencia de otra culebra, similar a la primera, verdosa por la barriga y de lomo amarronado. Estaba sobre un muro, a pocos metros también de la casa. Tuvo tiempo de fotografiarla. Asegura que vive en una zona rodeada de casas en las que las fincas están cuidadas y segadas, pero cree que la serpiente pudo llegar de la zona próxima al río. Sostiene que cuando apareció la primera, los mayores del lugar ya le advirtieron que «nunca vai unha soa». «E apareceron dúas con poucos días de diferenza».
No es el único caso que ha trascendido en A Mariña. Los vecinos dieron la voz de alarma en mayo cuando apareció una culebra en el caño de una fuente del centro de Viveiro. En días pasados, en Galdo (Viveiro), encontraron una culebra de 1,5 metros.