Anulan en la comarca recibos de la luz de más de 2.000 euros

s. luaña vilagarcía / la voz

AROUSA

01 oct 2014 . Actualizado a las 04:55 h.

Varios vecinos de la comarca -se sabe al menos de tres casos en O Grove- han reclamado ante la Consellería de Economía e Industria lo que ellos consideraron en su momento un cobro desproporcionado e irregular de su consumo energético, al haber recibido facturas en algunos casos de más de 2.000 euros por un supuesto error en la tarifación resultante, según las compañías comercializadoras, de una manipulación en los contadores.

Uno de los afectados recibió hace unos meses una factura de 2.187 euros; en otro caso, el importe ascendía a 1.215 euros. En los dos, la comercializadora encargada del cobro de la facturación había detectado errores en los contadores de la luz achacados a una manipulación de los aparatos. La rectificación llevada a cabo dio lugar a esas facturas con las que estos vecinos no estaban de acuerdo, de ahí que denunciasen los hechos ante Industria. Se da la circunstancia de que, al menos en las dos reclamaciones resueltas de las que se tiene constancia, las facturas fueron anuladas, ya que la normativa vigente al respecto no permite cobrar errores en la facturación anteriores al último año, y en estos casos, los recibos procedían de consumos realizados entre los años 2010 y 2012.

En los dos casos, los afectados pusieron los hechos en manos de sus abogados, que gestionaron las reclamaciones, pero se cree que hay otros muchos en los que los consumidores pagan religiosamente las cantidades reclamadas, de ahí que animen a todos aquellos que se encuentren en una situación similar a que denuncien el caso, porque podría tratarse de un cobro abusivo.

Manipular los contadores

El despacho de abogados Foro Lex y la letrada grovense Diana Otero calculan que puede haber muchos afectados más en la comarca. Y aunque Industria anuló estos recibos por tarifar consumos anteriores al último año, Diana Otero llama la atención de otros aspectos por lo menos sospechosos en estas reclamaciones, en las que en cierto modo se acusa a los titulares del servicio de haber manipulado los contadores. Subraya que en estos casos, los consumidores no tenían acceso a los aparatos, y además, desconocían su funcionamiento. Por otra parte, las reclamaciones llegaron en algunos casos acompañadas de amenazas de corte del suministro. A entender de la letrada, la liberalización del sector eléctrico deja a menudo a los consumidores en una situación «próxima a la indefensión». Sostiene que si los contadores funcionaban mal deberían proceder a su cambio, y sin embargo, «se limitan a enviar facturas de retarificación complementaria».