Concellos y comuneros de Sanxenxo y O Grove libran dos guerras paralelas, pero independientes, sobre la titularidad del istmo más famoso de Galicia
01 feb 2015 . Actualizado a las 05:00 h.Dos conflictos administrativos enfrentan a Sanxenxo y a O Grove por la playa de A Lanzada. Son dos procesos paralelos, pero independientes, que han hecho correr ríos de tinta y provocado acaloradas discusiones a ambos lados del istmo más famoso de Galicia. Estas son sus claves.
El detonante
Monte comunal. El Xurado Provincial de Montes está revisando actualmente la clasificación del monte comunal de A Lanzada, que en 1989 falló a favor de los vecinos de Noalla. No es habitual que el Xurado revise una decisión tomada hace tantos años. Lo hace obligado por un Juzgado de lo Contencioso, a instancias de una reclamación del Concello de O Grove. El juez determinó que no se había tramitado bien el expediente al no dar audiencia al Concello meco.
Los aspirantes
Noalla y O Grove. El Xurado de Montes tiene dos opciones para clasificar el istmo. Puede pronunciarse a favor de los vecinos de Noalla, en Sanxenxo, como ya hizo en 1989 cuando se realizó el primer expediente sobre el monte comunal. Sin embargo, el Concello de O Grove defenderá ante el Xurado que el istmo debe clasificarse a su favor, aportando los argumentos que estime oportunos. Este expediente del monte sigue abierto y no afecta a los límites municipales.
Las posturas
Diferencias irreconciliables.El recurso del Concello de O Grove y la orden judicial de retrotraer el expediente de clasificación del monte sentaron como un jarro de agua fría en Noalla. El presidente de los comuneros sanxenxinos, Roberto Garrido, ha insistido en que el monte es de sus vecinos, que no quiere choques con San Martiño y que no entiende al Concello meco. Por su parte, el alcalde de O Grove, Miguel Pérez, reitera que el monte debe ser de clasificado a favor de sus vecinos. Ambas partes aportan sus argumentos históricos.
En juego
La pieza disputada. Los comuneros de Noalla inciden en que el monte de A Lanzada se extiende desde Foxos hasta O Con da Gaivota y Pantoeira, al otro lado del istmo. Dicen que este terreno fue históricamente aprovechado por los sanxenxinos y que a O Grove solo le corresponde la playa de Sanatorio, ajena a A Lanzada. Por su parte, los mecos abogan por llevar la línea hasta los límites municipales e insisten en que Noalla no ha hecho un aprovechamiento de ese monte en cincuenta años.
Segundo frente
Guerra de lindes municipales. La alcaldesa de Sanxenxo, Catalina González (PP) irrumpió en la polémica anunciando el pasado marzo que la revisión judicial del monte comunal daba pie a Sanxenxo a instar ante la Xunta y el Estado una revisión de los límites municipales. Este anuncio fue acogido con escepticismo por el regidor meco, el también popular Miguel Pérez, que manifestó y mantiene aún que la reclamación sobre los límites municipales no se sostiene y que es una cuestión juzgada y cerrada.
El procedimiento
Pleno de Sanxenxo. González cumplió el pasado lunes su anuncio de marzo y el pleno de Sanxenxo -con la abstención del BNG que tachó la propuesta de electoralista- aprobó instar a la Xunta y al Instituto Geográfico Nacional la revisión de las lindes. La propuesta del gobierno sanxenxino tiene dos informes técnicos contradictorios. El del secretario rechazó la iniciativa asegurando que no tendría recorrido administrativo. La corporación se apoyó en un informe externo que decía que sí lo tendrá.
La reacción
Réplica de O Grove. El alcalde de O Grove insistió en que la petición de revisar las lindes no prosperará porque esta polémica está zanjada desde 1961 por el Supremo. Pérez afirmó que detrás subyace el control de los quioscos del istmo, que son gestionados por el Concello al que pertenezca la playa. Sanxenxo no replicó a esta acusación, que sí negó Noalla. El presidente provincial del PP, Rafael Louzán, pidió el cese de las hostilidades:«O emblema da Lanzada non pode ser obxecto de disputa». González no le hizo caso. Al día siguiente la regidora dijo: «Está en discusión a quen pertence A Lanzada, é omomento».