Motor carcamán en la motora de regreso a la Tercera División

Pablo Penedo Vázquez
Pablo Penedo VILAGARCÍA / LA VOZ

AROUSA

Martina Miser

El club isleño logra el salto de categoría con uno de cada cuatro jugadores del equipo nacido en la localidad. Además Beni Otero, Harry y Amancio trabajaron en la parcela técnica apuntalando la labor del primer entrenador

25 may 2016 . Actualizado a las 09:03 h.

El quinto ascenso a Tercera División le ha sabido a gloria a la parroquia del Céltiga. Por muchos y variados motivos. Desde los dos años de sufrimiento hasta la llegada a finales de la temporada pasada del cambadés Edu Charlín al banquillo como recambio de urgencia desde el conjunto juvenil, hasta una segunda mitad de Liga extraordinaria, sumando 44 de los 57 puntos disputados. Pero sin duda una de las cosas que más llenan de orgullo al club, en particular, y a sus vecinos, en general, es ver cómo su equipo ha logrado el salto con uno de cada catro jugadores de su plantilla nacidos en A Arousa. Con Javi ocupando un papel protagonista en calidad de uno de los tres capitanes de la tropa de Charlín, Álex Pena haciéndose un hueco importante, y David Falcón y los hermanos Sergio y Adrián Rodríguez contribuyendo a generar la dinámica de grupo con la que el Céltiga alcanzó el salto de categoría.

El DNI carcamán en los componentes de la motora isleña de regreso a Tercera se extiende al cuerpo técnico, con Amancio, el fisioterapeuta, y dos hombres que condensan los tres últimos lustros de historia del Céltiga, en los que vivieron tres ascensos y dos descensos. Harry, en labores de delegado del equipo, y Beni Otero, que dos años después de colgar las botas en el último descenso a Preferente, aceptaba la propuesta de Charlín para ser su segundo.

«Cando veu falar Edu comigo pensei que estaba de cachondeo». Pero Beni, que había dicho adiós a los terrenos de juego con 30 años por incompatibilidad con la regencia de la Taberna dos Baláns, lo «falei coa miña muller, e dixen que si» en una decisión con la que hoy se muestra encantado. Y no solo, o incluso no tanto por el ascenso, que también lógicamente, sino por todo lo que le ha dado su primera experiencia en el trabajo desde el otro lado de la banda.

Sobre el ascenso, «vívese doutra maneira ca coma xogador. Como futbolista disfrútalo moito máis, cada segundo. Como técnico estás máis pendente de todos os detalles», claro que «cando o árbitro pita o final todos somos unha piña» y a él, como a más de un compañero de celebración, «inda hoxe -por ayer- me doe a cabeza». Del trabajo de segundo de Charlín Beni dice que «disfrutei coma un anano. Aprendes día a día cousas que antes vías doutra maneira. Como xogador es más egoísta, e deste lado debes saber xestionar un grupo». Y en el caso del Céltiga «tiñamos o mellor plantel da Liga, pero fumos de menos a máis porque había moita xente nova, e levou tempo que estivera ao 100 %. Empezaron atenazados, pero unha vez que o equipo se víu arriba sentíu que non o podía baixar ninguén».

De la mano de un Edu Charlín que «como xogador me encantaría ter, polos seus coñecementos, porque é moi directo e moi próximo», Beni sostiene que el Céltiga ha conseguido tras un par de años de alejamiento del pueblo de su equipo empezar a recuperar la tradición local de que «o fútbol na Illa é como a relixión, os domingos polas mañás a xente vai á misa, e pola tarde ao Salvador Otero».

Harry, delegado del Céltiga desde el segundo año de mandato de Petote a excepción de un par de temporadas, se queda con el ascenso en Hío en la 2004/05 como «o máis especial» para él, y el de la 2011/12 en casa con el Choco en la última jornada con gol de Ferreiro en el 83 como «o máis emocionate», ante cerca de 2.000 personas. ¿Y este? «Este foi o premio merecido ao traballo do equipo. Non é doado subir. Ademais de ter bo equipo, e tiñamos o mellor plantel da categoría, hai que traballalo, e ter sorte».

Una realidad y cuatro perlas por pulir

Dice Harry que en sus años como delegado de Manolo Núñez, uno de los entrenadores que más alegrías han dado al Céltiga, «aprendín moito. A que un equipo que aspire a ascender ten que adestrar catro días á semana, e nós fixémolo ata que en Nadal o preparador físico decidíu que a partir de entón bastaba con tres»; o que «cando non se sabe que pasa, hai que falar cos xogadores», como habría hecho Edu Charlín aconsejado por el propio delegado tras la derrota en Ourense en la segunda jornada de la segunda vuelta, que acabó resultado el punto de inflexión hacia el ascenso.

En todo este proceso participaron los cinco jugadores isleños del plantel, a los que habría que sumar a los vilanoveses Róber y Pablo, que como Sergio, Adrián y David Falcón subían el pasado verano del equipo juvenil en el que se acababan de licenciar con Edu Charlín al frente. Este es el análisis uno a uno del segundo técnico del Céltiga, Beni Otero.

Javi

El joven capitán que ya sabe lucir galones.

Uno de los contados jugadores que continuaron del anterior plantel, estrenado en el primer equipo en el anterior paso del Céltiga por la Tercera (2012/13). «Un alicerce do grupo», dice Beni, «un home importante, capitán xunto con Janeiro e desde que Carlos marchou ao Boiro, con Iago Nogueira. Un dos líderes do vestiario», titular como mediocentro defensivo hasta su lesión de tobillo de 2 meses en el campo del Ourense, a pesar de la cual sumó 1.779 minutos de juego.

Álex Pena

El repescado de oro.

Cedido en el Cambados en el tramo final de la anterior temporada, «comezou de titular, e rematou alternando o once coas saídas desde o banquiño. É un xogador de banda moi rápido, un dos máis rápidos da categoría», apunta Beni, «sempre dándolle cousas positivas ao equipo». Sus números, 1.608 minutos de juego y 8 tantos en su haber.

David Falcón

Un gran activo de futuro.

«O ano pasado inda era xuvenil. Ten moi boas condicións, fisicamente moi forte, non se agocha nunca. Vai ser un xogador importante», pronostica Beni. Interior izquierdo o mediapunta, jugó 638 minutos y marcó un gol.

Sergio y Adrián

Esperando su oportunidad.

«Sergio vaise aburrir de xogar, pero ten que ter paciencia, porque diante ten a un porteiro como Marcos». Su hermano Adrián, central, «estará moito tempo no Céltiga se el quere».