Las comarcas de Arousa, Deza y Pontevedra suman ya treinta mil parados de larga duración

carmen garcía de burgos PONTEVEDRA / LA VOZ

AROUSA

CAPOTILLO

Ni siquiera ocho de los contratos que se firman en la provincia hoy en día tienen carácter indefinido

23 feb 2017 . Actualizado a las 05:00 h.

Las comarcas de Pontevedra, Arousa y Deza cuentan en estos momentos con un total de 30.000 parados de larga duración; es decir, hay tres decenas de miles de habitantes que llevan más de un año buscando empleo de forma activa. Y sin encontrarlo. Parte de ellos están incluidos en las 24.700 viviendas de la provincia con algún miembro en activo pero todos en paro. El panorama que dibuja a una familia en edad y condiciones de trabajar -sin discapacidades ni otra causa de baja definitiva- sin lograr emplear a ninguno de ellos empieza a ser, afortunadamente, cada día un poco menos frecuente. Desde el último trimestre del 2015 hasta el del año pasado la cifra bajó en casi cinco mil familias, ya que entonces se situaba en 29.600. Lo que no se ha reducido, paradójicamente, es el número de viviendas que no recibe ningún ingreso, que ha pasado de las 14.500 de finales del 2015 a las 14.800 del 2016.

A pesar de estas cifras, lo cierto es que la provincia de Pontevedra es la que cuenta con un mayor número de parados que reciben alguna prestación; y, sin embargo, al mismo tiempo es la segunda con una tasa de cobertura más baja de Galicia. En otras palabras, hay más pontevedreses sin empleo cubiertos por algún tipo de ayuda, pero en proporción, menos que en otras provincias. La diferencia de la densidad de población de Pontevedra y A Coruña con Lugo y Ourense explica la diferencia. Así, mientras en las dos primeras se benefician de algún tipo de ayuda unas 80.000 personas -40.496 en Pontevedra y 39.000 en A Coruña-, sus tasas de cobertura son las menos elevadas de Galicia con el 53.3 y el 53 %, respectivamente, porque hay muchos más habitantes y desempleados. Lugo y Ourense, por su parte, albergan a once y diez mil parados que reciben una prestación, lo que se traduce en un 57,9 y un 54 % del total de personas sin trabajo de ambas provincias.

Este es el panorama que arroja la última Encuesta de Población Activa (EPA), que advierte de que la crisis laboral no se ceba únicamente con quienes no tienen trabajo. Los empleados también sufren las consecuencias de una precarización continua de los puestos de trabajo. De hecho, en la provincia de Pontevedra únicamente menos de ocho de los contratos que se firman hoy en día son indefinidos. Este porcentaje es menor incluso que el que se registra de media en la comunidad, que asciende a nueve, de los que solo cinco reúnen, además, la cualidad de ser a tiempo completo.

Menos de siete días de contrato

En el otro lado de la balanza están los más cortos, ya que en estos momentos una cuarta parte de esos 91 contratos que se firman con carácter temporal son para menos de siete días. Sorprende esta tasa de temporalidad sea, además, la más alta de los últimos ocho años. En la provincia asciende al 29,1 %.