La Guardia Civil desmantela un grupo criminal responsable de trece robos en empresas y naves

La Voz PONTEVEDRA / LA VOZ

AROUSA

Guardia Civil

Alguno de los detenidos suma más de cien detenciones por delitos contra el patrimonio

28 abr 2017 . Actualizado a las 05:00 h.

Cuatro meses de intensas investigaciones han fructificado en el desmantelamiento por parte de la Guardia Civil de Pontevedra de un grupo criminal que se había especializado en desvalijar establecimientos comerciales y naves industriales. Bautizado como operación Speranto, este operativo se ha saldado con el arrestado de cuatro personas, mientras que una quinta ha sido identificada y figura como investigada, así como se han esclarecido trece robos ocurridos, en su mayor parte, en las Rías Baixas.

Estas pesquisas arrancaron a finales del pasado año al observarse un incremento de este tipo de robos. El análisis pormenorizado del modus operandi empleado en estos asaltos permitió centrar la investigación sobre un grupo de personas, que con domicilio en distintos municipios pontevedreses tenían a sus espaldas amplios historiales de antecedentes policiales. Alguno de ellos suma más de cien detenciones por delitos contra el patrimonio, habiendo cumplido condenas de hasta cinco y doce años de prisión.

Asimismo, dos de los arrestados figuraban reclamados judicialmente para cumplir condenas pendientes. De este modo, el primer detenido se encuentra en prisión provisional desde marzo. Los arrestos de estos individuos se sucedieron de forma escalonada. Así, en marzo se produjo el primero en Ponte Caldelas, mientras que el segunda se concretó el pasado lunes en Peinador. Pretendía tomar un vuelo para abandonar la península con cinco mil euros en efectivo. Veinticuatro horas después se sucedieron los otros dos arrestos en Redondela y Pazos de Borbén.

Registros

Paralelamente, la Guardia Civil realizó tres registros domiciliarios en Redondela, Pazos de Borbén y A Lama, «donde se recuperaron diferentes efectos relacionados con los robos investigados: equipos informáticos, teléfonos móviles, útiles y herramientas para la comisión de los robos y una importante cantidad de dinero en efectivo».

A la vista de estos hechos, a los sospechosos se les acusa de trece robos con fuerza, además de que se les atribuye los delitos de pertenencia a grupo criminal, receptación y blanqueo de capitales.