Un pueblo de Barro, asediado por un grupo de perros peligrosos

Alfredo López Penide
López Penide BARRO / LA VOZ

AROUSA

Vecinos de Bretoña dicen que no pueden llevar una vida normal

30 abr 2017 . Actualizado a las 05:00 h.

En Bretoña, en la parroquia de Curro (Barro), los niños no salen a jugar a la calle y los adultos se lo piensan dos veces antes de salir a pasear. «Collemos o coche para recorrer os corenta o cincuenta metros que hai ata a marquesina do bus escolar», apunta un vecino, a lo que otra residente de este lugar ubicado al paso de la PO-531 añade que hay zonas por las que ya ni se acerca.

Y todo por un grupo de perros potencialmente peligrosos que residen en una vivienda próxima. Fuentes municipales han confirmado que carecen de chip y licencia, así como que «as persoas que viven aí non son aptas para ter cans de raza perigosa por antecedentes que teñen».

Todo comenzó a mediados de febrero cuando cinco perros rodearon a una mujer llegando a morderle. Aseguran que uno de los propietarios, que comenzaron a vivir de alquiler en la vivienda unas semanas atrás, llegó a amenazarla cuando hizo ademán de llamar a la Guardia Civil. Y los incidentes se sucedieron. Una mujer de unos 70 años se vio obligada a saltar el muro de cierre de una casa para escapar del asedio de los animales, mientras que otra se tuvo que introducir en el coche de unos vecinos para huir de ellos. Una tercera tuvo la sangre fría de permanecer inmóvil hasta que los canes que la rodeaban se cansaron y se fueron.

Los vecinos consultados aseguran que los animales se escapan habitualmente de la propiedad y denuncian que «non están censados no Concello» y ponen en duda que sus dueños dispongan del perceptivo seguro de responsabilidad civil obligatorio. Las Administraciones disponen, asimismo, de fotos donde se observa a los perros sueltos en la vía pública sin bozal. «É un cúmulo de despropósitos, pero a realidade é que os cans seguen aí». Los vecinos consideran que ni la Guardia Civil, ni otros organismos y Administraciones están de su lado y que solo el Concello de Barro está haciendo algo para tratar de solucionar esta problemática. «Chamas ao Seprona e te din ‘‘está en curso’’», lamentan.

Medio Ambiente ya abrió un expediente sancionador por una supuesta falta grave. Por su parte, el alcalde dejó claro que «Barro non deu ningunha licenza para que estean eses cans en Barro».