Terra de Asorey renueva su imagen y la bodega para atraer al enoturismo

Maruxa Alfonso Laya
m. alfonso MEIS / LA VOZ

AROUSA

MARTINA MISER

Las obras buscan integrar el edificio en el paisaje y crear un auditorio al aire libre y un parque de esculturas

30 may 2017 . Actualizado a las 05:00 h.

Hace ya una década que seis empresas familiares dedicadas al cultivo y elaboración del vino albariño decidieron unirse. Formaron lo que hoy es la primera agrupación de intereses económicos del sector del vino con varios objetivo: adaptarse a los tiempos, seguir creciendo e internacionalizarse. La experiencia ha resultado ser todo un éxito. Terra de Asorey, que así se llama esta firma, compró el pasado año una bodega propia. Ahora, aspira a impregnar ese edificio de toda su filosofía para que se integre mejor en el paisaje y pueda convertirse en un referente del enoturismo. Para ello ha diseñado un completo cambio de imagen que ha comenzado por la botella, pero que será reflejado también en el inmueble.

Seis letras «a» formando una estrella son el nuevo logotipo de la marca. Obra del autor Pepe Barro, estas seis letras representan a las seis empresas que en su día dieron forma a este proyecto, pero también seis palabras que definen la filosofía de la firma: albariño, adega, Asorey, arte y amor. Este diseño es el que ha tenido también en cuenta la arquitecta Teresa Sánchez Táboas para elaborar un cambio de imagen del edificio y de todo el paisaje que le rodea. Un enrejado blanco, con una cubierta vegetal, cubrirá el edificio con el fin de integrarlo en su entorno. Pero el proyecto va mucho más allá y quiere convertir este espacio en un lugar de paso y de encuentro para los amantes del vino. Aprovechando que el inmueble está rodeado de rutas de senderismo, se habilitará una zona para aparcar bicicletas, con sombras y bancos de descanso. «Queremos que a xente nos coñeza de maneira sostible, que veña andando ou en bicicleta», añadió la arquitecta. Habrá, además, un círculo central en el que se recibirá a los visitantes. Y se construirá la Eira de Asorey, un lugar que quiere llevar más allá el concepto de finca para convertirla en un auditorio al aire libre, con espacio para mercadillos navideños, para actuaciones musicales «e para que os veciños poidan dar a coñecer a súa vida a todo o mundo», explicó. Habrá también un parque para esculturas, pues O Salnés es tierra de artistas.

Una asociación con diez años de historia que consigue el Galicia Calidade

Diez años después de su nacimiento, el balance de Terra de Asorey no podía ser mejor. Su presidente, Xosé Ramón Durán, explicó ayer en detalle el proyecto que nació de la unión de seis empresas familiares. Relató que, hace ahora una década, «nos demos conta de que o mundo estaba cambiando e de que nós deberíamos cambiar con el». Fue así como nació Terra de Asorey, una empresa que se dedica a la comercialización del vino del mismo nombre, pero también de Nai y Pazo Torrado. La firma se lanzó a la conquista de los mercados internacionales en el 2011 y hoy está presente en más de catorce países de todo el mundo.

La excelencia y la calidad han estado siempre entre sus máximas, por eso cuentan ya con varias certificaciones. Ayer, dieron un paso más al recibir el Galicia Calidade, que vino a entregarles el conselleiro de Economía, Francisco Conde. «É un orgullo ter en Galicia este tipo de adegas que conforman proxectos tan diferenciados», destacó tras escuchar todos los proyectos de futuro de la firma. Porque además de la reforma de la bodega y del diseño corporativo Terra de Asorey también está trabajando, entre otras cosas, en el lanzamiento de su primer espumoso.