El tinto, también para comer

Bea Costa
bea costa VILAGARCÍA / LA VOZ

AROUSA

OSCAR VíFER

Mientras en Ribadumia bebían y cocinaban con vino, en Vilanova daban cuenta de 500 raciones de paella

05 jun 2017 . Actualizado a las 05:00 h.

Sopas de burro cansado, peras y torrijas al vino, tinto con requesón..., el vino que más mancha siempre tuvo cabida en el recetario tradicional de Galicia, pero ayer hubo ocasión de descubrir otras aplicaciones culinarias más innovadoras gracias a los showcooking celebrados en la Festa do Viño Tinto do Salnés (Ribadumia). Según Rocío Rodríguez, este vino se presta para la cocina. «É fácil cociñar con el, ten uns toques de acidez que permiten xogar coas texturas e os sabores. O tinto dálles un toque fresco aos pratos». Sabe de lo que habla. Ayer preparó un menú completo con el tinto como ingrediente de cabecera: alboronía con sardinillas y salsa de tinto; carrillera de porco celta guisada al vino con crema de fabas de Lourenzá y queso San Simón da Costa; y de postre, bica de millo de Bergantiños, peras al tinto y otras delicias. Por la tarde, a los fogones se puso Arturo, que cocinó pulpo al estilo Ons y choquiños en su tinta con tinto de Barrantes.

La gastronomía está ganando cada vez más protagonismo en esta fiesta, con el fin de diversificar la oferta y los atractivos para visitar Ribadumia el primer fin de semana de junio. La organización no estaba ayer en disposición de ofrecer cifras de asistencia ni de botellas consumidas pero, a vuela pluma, estima que se superará el balance del año anterior. Al reclamo del tinto se celebraron este fin de semana numerosas actividades como conciertos, verbenas, cantos de furancho, actuaciones folclóricas, una andaina, una exhibición de agility y no faltó, un año más, Abel Barandela y sus pinturas realizadas con vino tinto.

A pocos kilómetros de allí, en Vilanova, el menú se aderezaba ayer con arroz y empanada. Vista Real acogió por tercer año la Festa da Paella y repartió alrededor de quinientas raciones. En Dimo, Catoira, gastronomía y música fueron de la mano en la tradicional romería de San Cibrán.