Vilagarcía quiere ser «a gran cidade do Samaín» uniendo la Noite Meiga al Curtas

Pablo Penedo Vázquez
pablo penedo VILAGARCÍA / LA VOZ

AROUSA

MONICA IRAGO

El evento nocturno se traslada del verano al 28 de octubre, con opiniones dispares entre las asociaciones participantes

08 ago 2023 . Actualizado a las 19:05 h.

El Curtas Festival do Imaxinario de Vilagarcía de Arousa será este año más terrorífico que nunca. Hasta el punto de que el gobierno local pretende que la capital arousana se convierta en «a gran cidade do Samaín», la gran fiesta enraizada en la cultura gallega alrededor de la muerte que se celebra la noche de Todos los Santos. Con tal fin, el Concello de Vilagarcía, de acuerdo con las partes implicadas, ha recolocado la celebración de la Noite Meiga, trasladándola desde su habitual ubicación en las hojas estivales del calendario al 28 de octubre, el primero de los dos sábados de la próxima edición del Curtas.

La concelleira de Cultura, Sonia Outón, explica que la decisión tiene su origen en el cambio de fechas de la Noite Meiga realizado el año pasado. Tras haberse celebrado siempre desde su primera edición, 20 años atrás, el último sábado de agosto, el evento, con la participación de una decena de asociaciones culturales, sociales y económicas locales, se adelantó en el 2022 a la segunda quincena de julio. El motivo, el deseo del gobierno local de «non facer coincidir dúas programacións potentes» tras promover el colectivo O Soño de Lilith el Festivala, destinado a la visibilización del talento creativo de las mujeres. La previsión del Concello era repetir este año al distribución de eventos en el calendario. Hasta que la dirección del Curtas «ofreceu unha idea potente e acaída», señala Outón: incluir la Noite Meiga en el programa del certamen fantástico en su próxima edición, que estará centrada en los fantasmas.

Hace un mes la propuesta fue trasladada a las entidades que dan vida cada año a los poblados de la Noite Meiga con sus miembros ataviados de seres mágicos. La respuesta mayoritaria fue sí. Outón adelanta que nada va a cambiar en el concepto de la que había sido durante dos décadas la última gran cita festiva del verano en Vilagarcía: «A idea é manter a esencia da Noite Meiga. Vaise seguir servindo rosquillas e queimada gratis, que porá de novo o Concello xunto o material e a montaxe, e cada asociación a súa tapa particular».

A fin de colaborar en el éxito del experimento, el gobierno local baraja «facer un esforzo a nivel de decoración». De fondo, declara la concelleira de Cultura: «A nós interésanos moito máis desestacionalizar o turismo e traer xente a finais de outubro, que é moito máis complicado, ca no verán». Y en este caso, hacerlo sobre el principio de que «sumar elementos sempre multiplica».

En este punto, existen opiniones dispares entre parte de las asociaciones que dan vida a los poblados de la Noite Meiga. Rocío Louzán, presidenta de Zona Aberta, uno de los colectivos que han participado en todas las ediciones del evento, declaraba ayer que «os nosos asociados non están de acordo coa modificación da data. Era una cita consolidada o derradeiro sábado de agosto e non debera cambiarse, como non se cambiaría a Festa do Albariño nin a Romaría Vikinga». Dicho esto y apuntando un descenso de asistencia a la Noite Meiga el año pasado, Louzán aclara que el problema no es con el Curtas, al contrario: «Isto empezou o ano pasado co cambio de datas do Concello polo Festivala. Nós estamos de acordo en facer unha actividade para colaborar co Curtas, algo tipo magosto, pero á marxe da Noite Meiga».

Carlos Puga, presidente de la Agrupación Micolóxica A Cantarela, otra de las pioneras de la Noite Meiga, señala por su parte que «nós estamos para colaborar co Concello; por outra banda, vemos interesante potenciar o que está a facer a xente do Curtas, porque son moi serios e todo o que sexa colaborar con eles parécenos interesante». Y después, dice Puga, «haberá que facer un estudo a ver como funcionou» la mezcla.