Polémica en el instituto Asorey: el alumnado de cuarto de la ESO se expone a quedar sin excursión

Bea Costa
bea costa CAMBADOS

AROUSA

Martina Miser

Los profesores se niegan a acompañarlos cuando las familias ya han pagado 300 euros de gastos para el viaje

21 dic 2023 . Actualizado a las 05:00 h.

 La polémica está servida en el instituto Francisco Asorey de Cambados. Los cincuenta alumnos de cuarto de la ESO tenían programada y pagada parte de una excursión a Tenerife para después de Semana Santa y, a día de hoy, parece complicado que puedan hacer ese viaje. Los padres recibieron el martes la noticia de que, en contra de lo previsto inicialmente, ahora no hay profesores dispuestos a acompañar a sus hijos y, por tanto, les correspondería a ellos hacerse cargo de su tutela en la excursión.

La dirección del centro declinó ayer dar explicaciones al respecto. Los padres de alumnos sí han hablado e informan de que los docentes se niegan a acompañar al grupo porque en él hay seis alumnos sujetos a partes disciplinarios que, según el criterio del instituto, deben ser castigados dejándolos sin viaje de estudios.

Los progenitores de los chicos expedientados pusieron el caso en conocimiento de la consellería e inspección educativa resolvió que el centro no puede negarles el derecho a ir de excursión. La reacción del instituto ha sido negarse a colaborar con este viaje.

El problema es que las familias ya han pagado 300 euros por cabeza y desde la agencia de viajes les indican que no podrán recuperarlos en su totalidad; en concreto, perderían 90 euros correspondientes a los gastos de la reserva del alojamiento. La indignación es mayúscula porque, además del coste económico, se diluye la posibilidad de hacer el viaje soñado después de cinco años condenados a quedarse en el aula por culpa de la pandemia.

Los padres están organizándose para tratar de buscar una solución a través de un grupo de WhatsApp y ayer acudieron a la agencia de viajes con el fin de conocer la situación de primera mano. Sobre la mesa está la posibilidad de contratar a monitores profesionales para que acompañen a los chavales, pero llegados a este punto surge otro problema: el viaje ya no se consideraría una actividad escolar y, por tanto, habría que hacerlo fuera del horario lectivo, en vacaciones —cuando los precios suben—, o a costa de días de clase que no se podrían justificar.

Los padres tenían ayer previsto dirigirse por escrito a la dirección del centro y al claustro para pedirles que reconsideren su postura o que aporten alguna alternativa y también estaban considerando recabar el apoyo de la AMPA y Educación.

Desde la consellería, consultada a este respecto por este diario, se pronuncian en los siguientes términos: «As viaxes non son actividades lectivas. Non forman parte do deber do profesorado participar nelas, polo tanto acompañar os alumnos nas mesmas é voluntario».