La cooperativa inició los contactos para captar nuevos socios
24 mar 2017 . Actualizado a las 05:00 h.La cooperativa agraria Horsal (Cambados) quiere ampliar masa social y producción y, en este contexto, está dispuesta a recibir con los brazos abiertos a todos aquellos agricultores que estén dispuestos a participar de su proyecto. El cierre de la cooperativa Hortumia deja a una veintena de agricultores sin cliente al que vender sus verduras y hortalizas, y Horsal puede ser su solución. Ayer por la tarde estaba convocada una reunión entre una docena de estos productores con la dirección de Horsal con el fin de analizar esta posibilidad, en la que confluyen los intereses de ambas partes. Ya en su día, a la vista de la deriva económica de Hortumia, se había planteado la posibilidad de fusionar ambas cooperativas, pero la operación no prosperó y cada una siguió su camino.
Mientras en Horsal no paran de crecer, sus vecinos de Hortumia se fueron hundiendo más en los números rojos, hasta convertir la situación en insostenible. Su deuda supera los 350.000 euros y, hartos de no cobrar durante meses, los cooperativistas tomaron el pasado martes la decisión más drástica y dolorosa: liquidar.
Frente a este panorama, Horsal cerró el 2016 con una facturación de 2,8 millones de euros, lo que supone un incremento interanual del 21 %, y alcanzó las 2.300 toneladas de producto. Según la gerencia, todavía hay margen para crecer, tanto en el mercado nacional como en el Europa -Suiza es su última apuesta en el exterior-, y esta política de expansión implica un aumento de producción, que en la huerta de O Salnés no está siendo fácil alcanzar. Las tierras de los exsocios de Hortumia podrían abrirle nuevos horizontes.