Los chiringuitos se arman contra el mal tiempo

jessica cacabelos, r.e. VILAGARCÍA / LA VOZ

O GROVE

El perfil de los clientes que acuden estos días es muy variado, desde familias que se quedan a comer a grupos de jóvenes que pasan el rato tomando una cerveza.
El perfil de los clientes que acuden estos días es muy variado, desde familias que se quedan a comer a grupos de jóvenes que pasan el rato tomando una cerveza. mónica ferreirós< / span>

Para conjurar la amenaza de la lluvia, los negocios playeros recurren a la mejor gastronomía

04 ago 2015 . Actualizado a las 05:00 h.

Las vacaciones de agosto se estrenaron con el cielo oscuro y con algo de lluvia en toda la comarca arousana. Los recién llegados no pudieron disfrutar de las playas, pero sí de los paseos que recorren la costa, del paisaje y de la gastronomía. Una fusión posible gracias a los chiringuitos, que cada verano ganan simpatizantes que repiten su visita verano tras verano.

«Agosto es diferente»

Cierto es que el día de ayer chafó un poco los planes de estos locales, que en este mes siempre cuentan con más clientes. «Cada verano notas más que el mes fuerte sigue siendo agosto y el tiempo afecta bastante», comentaba Paula, dueña del chiringuito Chibaua, en A Illa. Pero no por esto hay que poner mala cara. Y es que las nubes también se pueden convertir en se pueden convertir en un buen aliado de estos negocios.

Paseo y descanso veraniego

Cuando el sol no se deja ver, los paseos que recorren la playa isleña de O Bao o la playa de La Lanzada, en O Grove, siguen atrayendo a numerosas personas por el encanto de su paisaje. «Hay menos gente en la playa, pero hay más personas paseando y consumen más», se comentaba en el chiringuito S.O.S., de A Illa. Tras una larga caminata, las terrazas captan la atención de los caminantes. El entorno en el que se encuentran estos locales es uno de sus ganchos.

Plato típico o innovador

Comer o cenar en estos lugares es para muchos el mejor momento del día. Y es que para esto, a nadie le importa si hace sol o no. En la mayoría de los chiringuitos, los platos típicos y más demandados, como la tortilla, los pimientos de Padrón o la empanada, no faltan. Pero en otros, como el Coco Bao, también en A Illa, se alejan de esta comida tradicional y ofrecen a sus clientes una cocina más innovadora. Ensaladas o empanadas de algas, pulpo con queso y almejas naturales a la plancha, son algunas de las propuestas que se pueden encontrar en su carta. Maribí, la cocinera, y sus compañeros Chicha y Manuel, quieren que su comida sea diferente a la demás. Maribí les da una vuelta a los platos, buscando la manera en que los ingredientes resalten y se valoren mejor. Y así, después de todo, no resulta tan extraño que estos negocios sean visitados incluso con el cielo gris.