La corporación quiere destinar el dinero que les corresponde en el Plan de Concellos a este equipamiento
26 oct 2016 . Actualizado a las 05:00 h.A pesar de que es un proyecto que «llevará su tiempo», la corporación municipal de O Grove ha aprobado ya la primera anualidad para financiar el auditorio que quieren construir en una parcela ubicada enfrente del centro de salud Monte da Vila y que es titularidad del Concello. La cifra a la que estiman que se elevará el coste es elevada y, por ello, requiere de la colaboración de otras administraciones para ser financiada. A falta de esta ayuda, el alcalde meco, José Cacabelos, informa de que la idea del grupo municipal es invertir en dicha obra todo el dinero que corresponde a O Grove en el Plan de Concellos de la Diputación entre los años 2016 2019. El de este año y el que viene, tal y como informa, ya lo tienen comprometido. Entre los dos suman un millón de euros. Las cuentas continúan.
A la falta de disponer del proyecto de ejecución definitivo, previsto para finales del mes que viene, la estimación es que el presupuesto alcance los tres millones de euros. Por ese motivo, Cacabelos quiere ampliar hasta el 2019 el compromiso de contar con el dinero de la Diputación para este fin. «Entre el 2018 y el 2019 quedaría amortizado otro millón», prosigue. El tercer millón restante se financiaría con el préstamos que contemplan solicitar. Serviría tanto para adelantar el dinero que luego llegaría desde el organismo provincial como para terminar la ejecución. «El concello puede asumir, por ejemplo, un préstamo a veinte años», explica Cacabelos.
Además de tener aprobada la primera anualidad, tienen contratado el proyecto constructivo que dará el coste final de la obra. Mientras no esté listo, no habrá nada en claro. En ese momento, se dará a conocer a los portavoces de la oposición y a los vecinos de O Grove para llevarlo después el pleno. Si todo sale según lo planeado, a la presentación del proyecto de ejecución definitivo le seguirá la adjudicación de la obra en el 2017, año en el que esperan sacar el plan adelante y poner fin al uso de una las carpas do Marisco como auditorio móvil.
A falta del proyecto definitivo, se estima que la obra llegue a los tres millones de euros