Un auditorio vanguardista para O Grove

Rosa Estévez
rosa estévez VILAGARCÍA / LA VOZ

O GROVE

concello do grove

El gobierno local plantea un edificio versátil, integrado en el paisaje y que necesita una inversión de cuatro millones de euros que el Concello podría abordar en solitario

11 abr 2017 . Actualizado a las 11:59 h.

«Hoxe é un día importante para O Grove». Con estas palabras iniciaba ayer el alcalde de esta localidad, José Antonio Cacabelos (PSOE), el segundo acto de presentación del proyecto de auditorio y escuela de música que se ha diseñado para la villa. Tras haber expuesto su propuesta a los grupos de la oposición, y antes de la presentación que a las ocho de la tarde se iba a realizar a vecinos y colectivos sociales y culturales, Cacabelos expuso ante los medios de comunicación un diseño que calificó de vanguardista y rompedor, que «encaixa coas múltiples necesidades que ten O Grove» y que, sobre todo, es factible, ya que el Concello estaría en disposición de abordar la obra, prevista en una parcela municipal de Monte da Vila, con financiación propia.

El préstamo posible

Y eso que el dinero que habrá que poner sobre la mesa no es poco. Según los cálculos que ayer expuso el alcalde, serán precisos 4.200.000 euros para hacer realidad una de esas instalaciones por las que O Grove lleva esperando toda la vida. Cacabelos llegó a la maratón de presentaciones del proyecto con las cuentas echas y repasadas. La Diputación, dijo, ya ha comprometido 470.000 euros del Plan Concellos para este fin. Y la situación de las arcas municipales se ha recuperado lo suficiente como para poder pedir un préstamo de 3.800.000 euros. Devolverlo a razón de 250.000 euros anuales es un esfuerzo que el Ayuntamiento puede asumir sin mayores problemas, sentenció. Y presentó los informes de intervención que avalan su discurso.

«Isto non quere dicir que non esteamos interesados a recibir axuda doutras administracións, todo o contrario. Se a Xunta, o ministerio ou a Deputación se queren sumar, serán benvidos. Pero se non, nós podemos sacar adiante este proxecto. Depende exclusivamente de nós», sentencia el regidor. «Por primeira vez, esta é unha decisión exclusiva de política municipal», dijo.

El gobierno local está entusiasmado con este proyecto y no parece dispuesto a perder tiempo, ni a dejar que los plazos se dilaten sin razón. Por eso, a lo largo de la próxima semana Cacabelos reunirá a los grupos de la oposición para saber «se apoian ou non» su idea. En cuanto tenga los respaldos suficientes -en realidad, solo necesita un voto más para lograr la mayoría absoluta que precisa- «convocaremos un pleno urgente» para poner en marcha la maquinaria. Los trámites serán largos, empezando por el cambio de calificación de los terrenos sobre los que se obraría, previstos inicialmente para equipamientos deportivos. La burocracia llevará su tiempo, pero una vez se adjudiquen las obras, estas deberían rematarse en un plazo de 18 meses.

Las múltiples configuraciones de un espacio con cabida para entre 500 y 700 personas

El edificio diseñado por el equipo de arquitectos que encabeza Alfredo Vázquez parece formar parte del Monte da Vila. El inmueble aprovecha los perfiles del terreno y parece encastrarse en el entorno, generando un espacio armónico y convirtiendo unos terrenos públicos ahora infrautilizados en una suerte de plaza abierta a todo tipo de espectáculos. La parcela no era fácil: está situada en una zona de gran pendiente, lo que supone un problema. De todas formas, la accesibilidad del recinto estaría garantizada con una entrada a nivel de la calle, por un lado, y por el otro gracias a un ascensor que arrancaría en las inmediaciones del viejo pabellón, salvaría el desnivel y, una vez arriba, permitiría acceder desde una acera con vistas sobre la ría a la zona del auditorio y, desde los pórticos de esta, al centro de salud y las instalaciones deportivas del entorno.

Todo eso es fuera. Dentro, se ha diseñado una enorme sala de espectáculos en la que el suelo estará inclinado en forma de cuenco para mejorar la visibilidad, y en el que las sillas serán independientes y móviles. Eso, sumado a un novedoso sistema de escenario, permitirá que la sala funcione como un auditorio convencional, con un escenario amplio y un patio con 500 butacas; en modo cine, retirando el escenario y dejando hueco para hasta 700 butacas; en modo arena, con el escenario en el centro, o con varios escenarios funcionando al mismo tiempo; y a modo de pasarela. Hasta se pueden retirar todas las sillas y crear una diáfana y enorme sala de exposiciones.