Las obras de la carretera de Ardia provocan la indignación de los vecinos

Maruxa Alfonso Laya
m. alfonso O GROVE / LA VOZ

O GROVE

MARUXA ALFONSO

Se quejan de que el nuevo pavimento hace ruido y suelta gravilla que daña sus coches

26 may 2017 . Actualizado a las 05:00 h.

Indignados están los vecinos de la zona de Ardia, en O Grove. «Hai seis meses dixéronnos que non se podían poñer bandas sonoras para limitar a velocidade porque facían moito ruído. E agora colocan un pavimento que fai un ruído tremendo», explica Raúl Fraga, presidente de la asociación. Pero no es esta la única queja que tienen. Al menos dos residentes han denunciado ante la policía que la gravilla que quedó suelta tras los trabajos de asfaltado provocó daños en sus coches. Y algunos más se quejaron ayer del nuevo pintado del vial, pues se han sustituidas líneas discontinuas por otras continuas.

Los vecinos de esta zona recuerdan que llevan años esperando por algún proyecto que ayude a mejorar la seguridad vial. Los vehículos alcanzan velocidades excesivas, lo que supone un peligro para los peatones. En lugar de colocar un semáforo u otra medida parecida, la Xunta optó por renovar el asfaltado. Lo hizo porque, según los técnicos, el anterior estaba fisurado y con las lluvias corría peligro de abrirse. Así que instalaron un nuevo asfalto que, lejos de contentar a los residentes, ha despertado su indignación. Este pavimento permite evacuar mucho más rápido el agua y un mejor agarre de los vehículos. «Aquí había que facer obras, pero non para a seguridade dos coches. Pedimos que puxeran algo para reducir a velocidade e puxeron un asfalto que fai un ruído infernal», se quejan.

Los residentes en este entorno aseguran que, desde que se asfaltó de nuevo el vial, el ruido en el interior de sus viviendas es insoportable. «Aislamos as casas e antes non se oía nada, agora é insoportable estar aquí», sostiene Fraga. Ya han trasladado sus protestas al Concello, quien ha hablado con los técnicos de la Xunta, administración que se ocupa de esta reforma. Pero los vecinos consideran que no se han tenido en cuenta sus quejas. «Xa empezaron a pintar, iso significa que as obras son definitivas», añade Fraga. La asociación convocará en los próximos días a todos los residentes en este entorno para ver qué medidas se pueden tomar con el fin de obligar a la Xunta a reformar este ruidoso asfalto.