Las demoliciones y las obras retornan a la finca de Megasa

a. g., s. g. VILAGARCÍA / LA VOZ

VILAGARCÍA DE AROUSA

Las únicas obras autorizadas en Megasa son de demolición y urbanización interior de espacios.
Las únicas obras autorizadas en Megasa son de demolición y urbanización interior de espacios. m. irago< / span>

El Concello advierte de que cualquier otra licencia exige que los propietarios aclaren cuál será su uso

01 jul 2015 . Actualizado a las 05:00 h.

Los obreros han regresado a la vieja nave de Megasa. Desde el lunes la actividad ha retornado a la instalación, donde a mediodía de ayer se podía observar a varios operarios trabajando tanto en el exterior como dentro del edificio. Con la vuelta de los trabajos han reaparecido también, por supuesto, los fantasmas sobre el uso que pueda tener ese espacio una vez reformado.

Una de las últimas grandes polémicas que surgieron en el mandato de Tomás Fole llegó apenas unos días antes de que diese comienzo la campaña electoral. El 4 de mayo los comerciantes de Vilagarcía se concentraron ante el Concello para protestar por la intención del gobierno de PP e Ivil de aprobar en Xerencia de Urbanismo un proyecto urbanístico para la finca de la antigua Megasa, tras el cual Zona Aberta sospecha que se esconde la puesta en marcha de una gran superficie comercial. En aquella protesta participaron también los grupos políticos que entonces formaban la oposición, con sus representantes acompañando al colectivo de comerciantes en sus reivindicaciones.

La situación ha cambiado y el PSOE es la formación que ahora desempeña la alcaldía de Vilagarcía. El Concello se apresuró ayer a aclarar que las únicas actuaciones que disponen de autorización municipal se limitan a la demolición de las naves irregulares y a los trabajos de urbanización interior de la parcela, en el sentido de ordenar espacios y trazar los viales previstos.

Punto. La consecución de cualquier otra licencia por parte de los propietarios de los terrenos, subraya el gobierno local, exigirá que estos aclaren qué uso pretenden darle a una parcela ubicada en el acceso desde Pontevedra, una zona estratégica como pocas en la capital arousana.

El plano del centro comercial

Varios indicios apuntan a la hipótesis del centro comercial, que tanto Zona Aberta como Ahituvi, los autopatronos y los placeros rechazaron en la concentración convocada ante la Casa Consistorial. El principal de ellos fue desvelado por el actual alcalde, Alberto Varela, que entonces ejercía como candidato del PSOE a la alcaldía. Varela exhibió un plano en el que podía leerse una referencia textual a la multinacional Alcampo. El diseño dibujaba una área de ventas de 5.000 metros cuadrados de superficie. El doble del límite que la Xunta establece a la hora de requerir su expresa autorización, además de la de las autoridades municipales correspondientes. El documento recoge, además, medio millar de plazas de aparcamiento.

El cambio de gobierno podría traer bajo el brazo decisiones importantes en este sentido. Así, Varela se refirió, tras ganar las elecciones, a la posibilidad de una suspensión de licencias.