Vecinos y comerciantes convocan una fiesta en la plaza de España

Serxio González Souto
Serxio González VILAGARCÍA

VILAGARCÍA DE AROUSA

monica ferreiros

Celebrarán el viernes la recuperación del espacio tras siete meses de obras

03 ago 2015 . Actualizado a las 23:05 h.

«Non foi sen tempo». Resulta complicado encontrar, entre los vecinos y comerciantes que pueblan el entorno de la plaza de España, alguien que discrepe de la tradicional sentencia con la que se reciben por estos pagos los afanes que han tardado demasiado en concluirse o suceder. Ayer, los operarios de la empresa Stradia Infraestructuras, que en enero daban comienzo a la renovación del céntrico espacio vilagarciano, pulían los últimos detalles para que, hoy mismo, los ciudadanos recuperen, mejorado e integrado en el área peatonal, uno de sus enclaves emblemáticos.

Que el retraso acumulado por las obras, un mes y medio, ha traído de cabeza a los habitantes de esta zona de Vilagarcía lo demuestra perfectamente la forma con la que celebrarán el término de los trabajos: una fiesta que se desarrollará en la propia plaza de España el próximo viernes. En la convocatoria colaboran vecinos, comerciantes, el Liceo-Casino, Arosa Bay y O Faiado da Memoria, además de la concejalía de Cultura.

El programa de la inauguración

El programa se iniciará a las siete de la tarde, con la apertura de juegos hinchables para los más pequeños. A las ocho menos cuarto se lanzarán bombas de palenque para, de inmediato, proceder al cortado de la cinta que correrá a cargo de los más jóvenes y los más veteranos habitantes del barrio. Os Terribles de Arousa serán los encargados de poner banda sonora al evento con un concierto durante el cual se distribuirán bebidas y pinchos.

Calculan los organizadores que a eso de las nueve y media tomarán el relevo los integrantes de Arosa Bay, que intercalarán su música con recitales poéticos de la mano de la Mesa das Verbas. Por último, O Faiado da Memoria proyectará imágenes antiguas de la plaza y de sus pobladores. La concejalía proporciona el escenario y la megafonía; el resto corre por cuenta de la iniciativa ciudadana del barrio.

En cuanto a la remodelación en sí, todo está listo a excepción de un par de aspectos menores. Uno de ellos es la necesidad de proteger las zonas ajardinadas hasta que crezca el césped. Esta es la razón por la que permanecen precintadas. La distribución de los bancos y el espacio intermedio ya está siendo objeto de debate entre sus futuros usuarios.