Fole renuncia a su puesto en el consejo del Puerto y recuerda el pacto que concede la vocalía al PP

Antonio Garrido Viñas
antonio garrido VILAGARCÍA / LA VOZ

VILAGARCÍA DE AROUSA

MONICA IRAGO

Su marcha se debe a la incompatibilidad del cargo con su nueva condición de diputado en Madrid

29 nov 2016 . Actualizado a las 05:00 h.

La llegada de Tomás Fole Díaz al Congreso comienza a hacer rodar el engranaje del Partido Popular de Vilagarcía. Si bien el político conservador aseguró desde el primer momento que su marcha a Madrid no conllevaría el abandono de la portavocía del grupo municipal, sí que se ha visto obligado a abandonar al puesto que ocupaba en el consejo de administración de la Autoridad Portuaria. Fole Díaz presentó ayer un escrito en el registro anunciando su renuncia por incompatibilidad de cargos con su nueva condición de diputado nacional. Su intención es que esa renuncia sea elevada a la próxima sesión plenaria que se celebrará en Ravella. Los planes del PP pasan porque sea en esa próxima sesión, de la misma forma, cuando el grupo popular comunique el nombre del sustituto, o sustituta, de Tomás Fole.

En este sentido, y probablemente en un intento de zanjar cualquier tipo de debate al respecto, el grupo municipal popular salió ayer a la palestra para recordar el acuerdo plenario al que se llegó en septiembre del año pasado en cuanto a la representación del Concello en los órganos colegiados. En concreto, en el segundo apartado del punto dos, en el que se especifica que la elección para la Autoridad Portuaria de Vilagarcía recaerá en un representante del Partido Popular y de otro del BNG.

El asunto no es baladí porque conviene recordar que ese acuerdo para la representación en los órganos colegiados llegó tras la firma del conocido como «pacto de ciudad». Aquel acuerdo al que llegaron socialistas y populares y que ayudó a desbloquear una situación que estaba enquistada. Fue entonces cuando el gobierno municipal consiguió sacar adelante las liberaciones del alcalde y de cuatro concejales socialistas, y el PP, una liberación y un cargo de confianza. Desde entonces, Tomás Fole no pierde oportunidad de lamentar haber llegado a aquel acuerdo, acusando a los socialistas de incumplirlo con reiteración.

El pleno de los presupuestos

El pleno en el que deben aprobarse los presupuestos municipales del año que viene entra también, por lo tanto, en escena, ya que el PSOE necesitará el apoyo o la abstención de alguna formación más para poder sacarlos adelante. Un problema que ya sufrió el equipo de gobierno de Vilagarcía con los del ejercicio del 2016, que fueron aprobados en junta de gobierno local. Esa opción no se puede aplicar con los del 2017, que deben ir a pleno. La otra posibilidad es que se prorroguen, pero esto tendría difícil encaje con, por ejemplo, la reciente decisión de rebajar el IBI.