La espía gallega que unió en Vilagarcía a Carmen Posadas y a Manuel Portas

Antonio Garrido Viñas
antonio garrido VILAGARCÍA / LA VOZ

VILAGARCÍA DE AROUSA

Mónica Irago

Los escritores hablaron de sus libros, pero también de sus vidas en las Conversas ao Solpor

15 jun 2023 . Actualizado a las 05:05 h.

«Te voy a dar un beso al acabar», le soltó Carmen Posadas a Manuel Portas. Y la culpa de ese ofrecimiento la tuvo María La Balteira, una de las espías de las que habla la escritora uruguaya en su último libro, Licencia para espiar, y de cuyo episodio resaltó Portas que estaba muy bien puesto en situación. Y fue entonces cuando Posadas rebeló que tenía algún amigo que le ayudaba tanto en la utilización de las expresiones —imprescindibles para que las historias tengan credibilidad— como en la puesta en escena de lo que quería contar. Pasó esto en las Conversas ao solpor, que ayer estuvieron moderadas por Susana Pedreira

Sucedía algo parecido con el libro de Manuel Portas. Unha cervexa Chang transcurre en Tailandia, porque la hija de Manuel quería haberse ido a Birmania pero él le vino a decir que mejor poco a poco. Y allá se fue a pasar alguna semana con la progenie, pero en lugares guays, «no como en Bangkok, que es imposible ir de un sitio a otro», coincidieron ambos. Portas, según confesó, no tenía mucha intención de sacar alguna novela de aquello, pero una vez puesto en escena un día surgió la luz y aparecieron las musas. Conste que, pese a que le dedicó el título, no cambia Manuel la Chang por la Estrella Galicia. Ni de lejos

La aventura de Manuel en Tailandia sirvió para corroborar, por si quedaba alguna duda, que la experiencia vital tiene una importancia tremenda a la hora de ponerse delante del ordenador. Carmen Posadas, por ejemplo, habla de espías, en femenino, y contó ayer que cuando llegó con su familia a la embajada de Uruguay en Moscú se encontraron con que en su casa, que no estaba en la mejor de las condiciones según dijo, había micrófonos ocultos por todos lados. Sin ningún rubor, que hasta a veces permitían escuchar a los espiados lo que contaban los espías.

Pero regresemos a María La Balteira, que fue lo que quiso ser, según explicó Posadas y apuntó Portas que eso pasó porque era gallega. Y lo que quiso fue ser juglaresa, y, esto igual no, protagonista de varias cantigas de escarnio, que lo del machismo es antiguo y ella se llevaba demasiado bien con Alfonso X como para no levantar envidias en la corte.

Ian Gibson y Alonso de la Torre

Vilagarcía Cidade de Libro llega hoy a su ecuador y lo hace con una jornada que lleva como tema Historias Literarias con un cartel que encabezan Ian Gibson y José Ramón Alonso de la Torre, que serán los protagonistas de las Conversas ao solpor, que moderará Carlos Crespo. De nuevo será el Literatour la actividad que abra la jornada, pero la agenda del día incluye también la presentación de la obra de banda diseñada O reiciño de Galiza, con la presencia de Inacio Villarino e Iván Suárez, responsables de los textos e ilustraciones de la obra respectivamente, que incluirá la proyección del documental García e Galiza. O fillo da traizón, y también la del libro Chévrere, 35 anos de axitación cultural.