La Autoridad Portuaria de Vilagarcía recibió varias consultas, pero el concurso de adjudicación quedó desierto
22 mar 2017 . Actualizado a las 05:00 h.La puerta abierta en el 2013 por el Ministerio de Fomento para dar un uso hostelero a los faros se ha encontrado con el primer revés en la comarca, ya que el concurso de licitación convocado para el de Lariño, en Carnota, ha quedado desierto.
Aunque desde la Autoridad Portuaria de Vilagarcía indicaron ayer que se atendieron varias consultas sobre la instalación, ninguna de ellas se materializó en la presentación de una propuesta por lo que, al menos por ahora, el inmueble continuará cerrado.
Sin embargo, no todo está perdido, desde el organismo señalaron que si alguien quiere optar a una concesión, en las mismas o en diferentes condiciones a las recogidas en las bases del concurso, podrá presentar una propuesta, aunque el plazo fijado ya ha expirado.
La noticia de que no hay candidatos ha sido recibida con desilusión por Marcos Rama, el portavoz de la entidad vecinal que, hace ya más de un año, presentó un proyecto para dar al edificio un uso social. Rama señaló que conocía a un empresario que le había transmitido su interés y confiaba en que se animase a darle uso.
Campaña vecinal
El portavoz comentó que, si continúa cerrada, la instalación se verá abocada a la ruina y explicó que las dependencias interiores presentan un importante deterioro debido a la humedad.
Marcos Rama expresó su intención de abordar este asunto con el regidor y manifestó su intención de volver a reactivar una campaña vecinal bajo el lema Salvemos o faro.
Asimismo, comentó que hace un año se llegó a un acuerdo, a través de la firma de un convenio entre el Concello y la Autoridad Portuaria, para que se derribase el cierre perimetral del faro, actuación que todavía no se ha realizado.
En cuanto al faro de Corrubedo, aún no se sacó a concurso.