El consumo de heroína aumenta entre los jóvenes que se inician en las drogas

Javier Romero Doniz
JAVIER ROMERO RIBEIRA / LA VOZ

BARBANZA

Las investigaciones evidencian que la clientela de los camellos es cada vez más precoz

26 mar 2017 . Actualizado a las 05:00 h.

Pongamos que a golpe de jueves la Policía Nacional arresta a dos vecinos con decenas de papelinas que contienen medio gramo de heroína cada una. Pongamos, por ser más precisos, que el número de bolsitas que esconden el derivado de opio se eleva a 659 y que existe una red de unos siete camellos que trabajarían en la calle para colocar dicha cantidad de droga en un solo fin de semana. Incluso podemos añadir que pocos días después, y sin salir de la comarca, se detiene a otros dos vecinos acusados de suministrar la misma sustancia a una segunda red de menudeo, que en este caso tendría su mercado en Compostela.

La cruda realidad es que estos supuestos no son tales, más bien hechos muy recientes que diferentes cuerpos de seguridad han dado por probados en sus diligencias. Documentos en donde se deja constancia de que existe una elevada presencia de heroína en la comarca para satisfacer las necesidades no solo de los consumidores habituales, también de otros nuevos que, en su afán por ir más allá, no dudan en experimentar con veneno puro. Un escenario que los mismos investigadores constatan en sus vigilancias y trabajo de campo, en donde ven que toda la heroína que hay en la calle, y de la que solo se requisa una pequeña parte, responde a una demanda insaciable.

Delito común

Pero más allá de la parte policial, y atendiendo a la judicial, no resulta necesario hacer demasiadas consultas para evidenciar nuevamente que las causas por tráfico de heroína, sobre todo a pequeña o media escala, también son numerosas en buena parte de los juzgados de la comarca o de la Audiencia Provincial de A Coruña. El problema es que en una comarca como Barbanza no existen estudios sociológicos concretos que aporten datos. La asociación antidroga Renacer, por ejemplo, es una entidad involucrada en la prevención, y, por lo tanto, su contacto habitual es con estudiantes a los que se inculca el lado correcto para llevar una vida sana. En este mismo colectivo reconocían esta misma semana que su trabajo es muy diferente, aunque no niegan su asombro ante el aumento progresivo de incautaciones de esta sustancia en los dos últimos años.

En la Unidade de Asistencia de Drogodependencias (UAD) de Ribeira también existe una realidad parcial de lo que ocurre en la calle. Este eficiente y honroso departamento municipal presta servicio, en muchos casos, a un perfil avanzado de consumidor, por lo que los iniciados todavía están lejos de plantearse si algún día tendrán que visitar sus instalaciones en Coroso.

Hechos

Lo que sí puede decirse con rotundidad es que, entre enero del 2015 y la actualidad, en el grueso de operaciones antidroga realizadas en la comarca, ya sea por la Policía Nacional o la Guardia Civil, se incautó casi tanta heroína como cocaína. Incluso si uno hace la búsqueda en la hemeroteca (no confundir con Google) fijando el espacio temporal dicho anteriormente, comprueba que la palabra heroína fue publicada 81 veces, por las 114 del vocablo cocaína. Publicaciones todas ellas en las que se evidencia un mercado incansable. Esta misma semana, en unos de los dos cuerpos de seguridad citados anteriormente, reconocían que su trabajo pone sobre la mesa que los camellos de heroína tienen cada vez clientes más jóvenes y de un perfil concreto. «Hablamos de chicos que consumen cocaína también, y derivados del cannabis, ya sea marihuana o hachís. Consumen todo eso y, además, heroína, así pueden subir y bajar de intensidad de sus sensaciones de euforia y relajación, y casi siempre fumándola, ese es el modo de consumo más frecuente hoy».

 

35 puntos de venta

Desmontados desde el 2015

Siguiendo la costa de Rianxo a Carnota, o pasando por municipios de interior como Lousame o Mazaricos, la Policía Nacional y la Guardia Civil han desmantelado 35 puntos de venta de droga desde enero del 2015. En el grueso de estos operativos se incautó heroína, una sustancia que se vende cada vez más en la comarca y entre nuevos consumidores.

 

Renacer reitera que el uso de alcohol, cannabis y coca es alarmante y avanza sin freno

No por reiterativo deja de ser alarmante. Pero, una vez más, el colectivo Renacer pone el acento en el aumento progresivo de alcohol y cannabis que hay en Ribeira, que es su particular tablero de juego. En el colectivo añaden que son opciones de ocio muy asentadas entre los jóvenes, y que sirven de antesala para drogas más duras, como la cocaína y la heroína. En el caso de la primera, en Renacer también evidencian una profunda preocupación por el uso indiscriminado que detectan de este procesado hecho a base de pasta de hoja de coca y cuyo consumo intentan frenar a toda costa en Renacer con cada vez menos recursos.

Pesimismo

Una de las reflexiones que realizaba esta misma semana una profesional titulada del colectivo, en lo referido al consumo de alcohol, cannabis o cocaína, es que «no deja de crecer». Una aseveración que Renacer, y otros colectivos de igual cometido, llevan repitiendo años, pero que todavía no ha tocado techo.

La misma profesional explicaba que otro motivo de preocupación es que algunos padres de alumnos a los que se imparten charlas de concienciación acaban destapándose como personas que evidencian una tolerancia sobre el consumo de cannabis que puede ejercer un mal ejemplo cada vez que lo hacen en presencia de sus hijos.

El tráfico si sitúa a niveles de hace 15 años

Hace doce meses se requisó un kilo de heroína en A Pobra. La Guardia Civil, entonces, atribuyó a quienes tenían la mercancía la capacidad de vender un paquete con esa misma cantidad cada 15 días. Falta decir que buena parte de esa sustancia se quedaba en la comarca para iniciar un camino vertical y descendente hasta llegar, primero, al camello, y, por último, al consumidor.

En el mismo cuerpo de seguridad que desmanteló esa organización de tráfico de drogas en A Pobra y está especializado en la lucha contra esta lacra a través de una unidad en A Coruña, reconocían entonces, y lo reiteraban esta semana, que la venta de caballo aumentó hasta situarse a niveles de principios de siglo.

Uno de los motivos de este panorama tiene su razón de ser en el beneficio que ofrece el tráfico de esta droga. Su valor, más allá de las estadísticas oficiales, fluctúa, y para lograr una buena tarifa hacen falta contactos. Un precio medio, por un kilo, tendría que situarse por debajo de los 30.000 euros, mientras que uno de coca puede superar, fácilmente, esa cifra. La principal ventaja de la heroína es que la ganancia será mucho mayor por las posibilidades que ofrece a la hora de adulterarla para obtener más cantidad y, en consecuencia, un mayor lucro para quienes apuestan por esta forma de vida ilícita.