«Una película no se escribe en un golpe de inspiración en un café»

víctor rodríguez

BARBANZA

cedida

Jan Hrebejk refleja en este filme 38 años de trabajo del guionista Petr Jarchovský

21 abr 2017 . Actualizado a las 05:00 h.

2016 • Eslovaquia • Jan Hrebejk • Zuzana Mauréry (María Drazdechová), Csongor Kassai (Marek Kucera), Zuzana Konecná (Iveta Kucerová), Tamara Fischer (Danka Kucerová), Martin Havelka (Jaroslav Binder), Éva Bandor (Hana Binderová) • Desde su llegada a un colegio en los suburbios de Bratislava, María Drazdechova (Zuzana Mauréry), la nueva profesora, ha puesto del revés la vida de los alumnos y sus padres. La conexión de la profesora con el Partido Comunista no es un secreto, y hará que todos se sientan amenazados y sin oportunidad de tomar decisiones que vayan en contra de ella.

En La profesora «se analiza el miedo, el oportunismo y la dignidad humana, con reminiscencias de La clase (Laurent Cantet, 2008) y Doce hombres sin piedad (Sidney Lumet, 1957). No es solamente una película sobre la era comunista o el acoso por parte de los profesores. Los dilemas morales, las manipulaciones y las ambigüedades nos las encontramos a diario. La historia se repite y vuelve una y otra vez. La naturaleza humana no cambia», comenta su director.

Basada en la propia experiencia en la escuela primaria del guionista Petr Jarchovský, «la situación que inspiró el guion ocurrió a finales de la década de los 70 y cambió mi forma de ver el mundo. La lucha contra la profesora que hace un mal uso de su posición nos hace recordar dilemas morales específicos de la época histórica en la que ocurrieron, pero también evoca dilemas humanos universales. Perduró en nuestra familia por la intensidad con la que la hemos vivido. Durante muchos años la hemos recordado y vuelto a contar. Lo que ocurrió en una reunión clandestina de padres fue lo que me inspiró para escribir este drama. Una película no se escribe en un golpe de inspiración en un café. Algunas historias necesitan de toda una vida para existir. En el caso de La profesora podría decir que he estado escribiendo el guion en los últimos treinta y ocho años, es decir, toda mi vida».

«La profesora -apunta Jarchovský- creo que estaba convencida de que no había nada malo en todo esto. Consistía en un beneficio mutuo. Pero los resultados de este modelo son destructivos. Por desgracia era algo que existía entonces y que todavía sigue existiendo. El sistema puede haber cambiado pero la naturaleza humana permanece. La profesora muestra el mecanismo que cultiva el coraje para enfrentarse al mal y cómo los valientes son siempre quitados de en medio. Pero no podemos tener una sociedad libre sin todos esos valientes que luchan contra las injusticias. Esto era tan cierto entonces como lo es hoy».