Las gangas inmobiliarias se agotan

Marta Gómez Regenjo
Marta Gómez RIBEIRA / LA VOZ

BARBANZA

MATALOBOS

Entre el estocaje que oferta la Sareb se incluyen una veintena de construcciones en la comarca, la gran mayoría localizadas en los municipios de Ribeira y Porto do Son

21 may 2017 . Actualizado a las 05:00 h.

Cuando la burbuja inmobiliaria saltó por los aires comenzaron a surgir ofertas en las que se ofrecían viviendas a precios de coste. Las gangas que proliferaron, en su mayoría, procedían de las entidades bancarias, que se quedaron con promociones de pisos prácticamente enteras ante la imposibilidad de los impulsores de la obra de hacer frente al pago de los créditos suscritos al paralizarse el mercado. Poco a poco, esa oferta de inmuebles a precios impensables antes de la crisis ha tenido salida y, aunque todavía quedan chollos, cada vez son menos.

Una muestra de ello es que el estocaje de viviendas en manos de las entidades bancarias se ha reducido a menos de la mitad en apenas tres años, bien porque han vendido los pisos, o bien porque los han traspasado a la Sociedad de Gestión de Activos Procedentes de la Reestructuración Bancaria (Sareb), también conocido como banco malo. Esta entidad sacó hace unos días una nueva campaña de ofertas con inmuebles por debajo de los 60.000 euros para aligerar stock. En la relación aparece únicamente un apartamento de la comarca: está situado en la calle Galicia de Ribeira, se construyó en el 2011, tiene una habitación y cuesta 52.826 euros.

Este es el piso más barato de la veintena que aparecen en la cartera de activos del Sareb en el área barbanzana, si bien es cierto que también es el más pequeño, con 40,3 metros cuadrados.

En cuanto a otros chollos que pueden encontrarse entre la cartera de inmuebles del conocido como banco malo, los interesados en adquirir domicilio a un precio competitivo deben saber que la oferta se concentra en los municipios de Ribeira y Porto do Son. Además del apartamento de Santa Uxía citado, hay ocho viviendas disponibles por menos de 100.000 euros, la mayoría de una misma promoción en la calle Mariño sonense, con superficies que oscilan entre los 45 y los 65 metros cuadrados. A ellas se suman otras dos de un edificio de la avenida de A Constitución de Portosín, en el que un piso con dos habitaciones y dos baños con 68 metros cuadrados se ofrece por 89.000 euros.

El resto de inmuebles disponibles se venden a un precio que va de los 100.000 euros de una construcción con 64 metros cuadrados en Porto do Son, a los 112.234 de otro con tres habitaciones y 92,5 metros en Ribeira.

Oferta descompensada

Aunque el volumen del patrimonio inmobiliario de las entidades bancarias ha mermado de forma considerable en los últimos años -gracias, en gran medida, a que se pusieron en el mercado gangas desde 34.000 euros-, eso no quiere decir, ni mucho menos, que el parque de viviendas vacías se esté agotando. En la zona de Barbanza quedan 15.000 sin ocupar, nada menos. Sin embargo, y eso se confirma echando un vistazo a la oferta tanto del Sareb como de las entidades bancarias con inmuebles en la comarca, no responden necesariamente a la demanda.

De ello hablan desde las agencias inmobiliarias, donde señalan que las personas que se aventuran a adquirir un nuevo hogar buscan espacios más grandes y tres habitaciones al menos. Frente a estos requisitos, lo que más abundan son los pisos de una o dos habitaciones que no llegan a los 80 metros cuadrados, salvo que se trate de un inmueble de segunda mano. Y el precio de los que alcanzan o superan los 100 metros cuadrados se dispara.