La directiva solicita al Concello de A Pobra y a Portos que agilicen los trámites para ampliar cuanto antes la instalación y dar respuesta a la demanda de los más de 120 remeros que tienen actualmente en sus filas

Álvaro Sevilla
Desde el 2014 en La Voz de Galicia. Aprendí en Barbanza y ahora escribo desde la delegación de Santiago de Compostela. Aquí me centro en sanidad y educación, sin dejar demasiado de lado los sucesos, la política, la economía y los problemas sociales.

O remos o remeros. Toca escoger. La sede del Club Remo Puebla se ha quedado pequeña. No hay suficiente espacio para los dos. «Non damos abasto. Somos moitos, temos máis de 120 rapaces e, se sumas o material, non queda espazo físico. Agora se queres sacar un barco ao mar, tes que retirar sete máis». Este es uno de los lamentos que más se escuchan en un club que ha intentado improvisar para adaptarse a las circunstancias. El primer paso ha sido retirar los remolques del interior de la nave, el segundo, colocar las embarcaciones en armarios con ruedas que les permiten liberar espacio para poder entrenar.

Pero ni así, el remo vive en pleno auge y a las puertas de la entidad siguen llegando críos que quieren entrenar. «Ao final quen o paga son os rapaces», destaca uno de los directivos del club, Antonio do Carmo, quien lleva casi cuatro décadas en la entidad. Confiesa que nunca había visto cosa igual: «Son máis dos que esperábamos, pero non queremos deixar a ningún fóra».

El espacio entre las embarcaciones es mínimo
El espacio entre las embarcaciones es mínimo CARMELA QUEIJEIRO

Para poner coto al problema, afirma, contactaron con el Concello de A Pobra en noviembre. Les solicitaron un proyecto para ampliar los laterales de la instalación, lo que les permitiría ganar 200 metros cuadrados. «Chegamos a un acordo, pero como é zona portuaria depende de Portos, o Concello ten que solicitar a concesión da nave e da ampliación», afirman desde el club. Defienden que el trámite todavía no se ha hecho, por lo que esperan que se agilice para que este no sea un año perdido.

El regidor local, Xosé Lois Piñeiro, reconoció que Portos no les ha dado autorización para el proyecto, algo que considera «sorprendente», y afirmó que tiene pendiente una reunión con la entidad gallega para tratar esta problemática. La solución tiene visos de alargarse en el tiempo. «Ata agora solo houbo boas palabras, queremos que se pase aos feitos», confiesa Do Carmo.

Cesión de la instalación

El tiempo corre en contra de los directivos del Remo Puebla. El campeonato de bateles está a la vuelta de la esquina y, si no consiguen espacio, temen tener que dejar material a la intemperie, ya que queda preparado de un día para otro. La idea de poner en marcha una sección de remo olímpico también se ha paralizado por la falta de espacio donde dejar las nuevas embarcaciones.

Miembras del club tienen que ajustar las embarcaciones en el exterior de la nave por la falta de espacio
Miembras del club tienen que ajustar las embarcaciones en el exterior de la nave por la falta de espacio CARMELA QUEIJEIRO

Como medida excepcional, los directivos se pusieron en contacto con Portos para solicitar alguna instalación en la que guardarlo. «Ensináronos a antiga fábrica de Escurís. Mandamos a documentación que nos pediron, pero seguimos sen contestación. Queremos saber se está dispoñible e o custo», reconoció Do Carmo, quien cree que puede ser la mejor solución antes de que se desencalle la ampliación de la actual sede.

Fuentes de Portos confirmaron que la instalación está libre y que existe la posibilidad de tramitar la concesión. A su vez, también afirmaron que están a la espera de recibir documentación para la ampliación de la sede.

Tiranteces

Mientras esperan por las administraciones, los problemas en el Club Remo Puebla son patentes, lo que ha obligado a habilitar en la planta baja un gimnasio en el que colocar remoergómetros. «Ou ampliamos ou esta época dourada vaise pola borda. A xente non está cómoda e hai choques entre adestradores e remeiros», destacaron desde el club.

Remeras pobrenses, en el momento de intentar sacar un batel al exterior
Remeras pobrenses, en el momento de intentar sacar un batel al exterior CARMELA QUEIJEIRO

Cuadrar horarios es otro de los galimatías a los que se tienen que enfrentar. «Ver que non se avanza cansa. Se isto se prolonga no tempo, teremos que pechar a porta. Esta é unha entidade sen ánimo de lucro e non nos dan solucións», destacó un Do Carmo que espera que las respuestas lleguen y que los remeros puedan centrarse en conquistar las aguas.