¿Vas a tomar antidepresivos?

Emilio Sanmamed
Emilio Sanmamed LIJA Y TERCIOPELO

BARBANZA

28 abr 2021 . Actualizado a las 05:00 h.

Has tenido un problema de índole psicológico y has decidido ir a un especialista. Te han recetado unos antidepresivos… pero no te fías mucho, porque las pastillas enganchan, porque las farmacéuticas pretenden perpetuar la enfermedad o porque conoces a alguien que superó una tragedia tomando solo infusiones de poleo menta.

Voy a contarte cómo lo viví yo, que como buen aspirante a artista maldito también pasé por una depresión hace años. Primero te diré que no soy un gran fan de los psicofármacos y que, a veces, su mal uso o su abuso acaban trayendo más problemas que soluciones, que depender de una sustancia exógena no es lo ideal. Pero reconozco que, en esa época de mi vida, a mí me salvaron. Habrá quien te mortifique por usar «cosas químicas» en lugar de hacer proyección astral o pedalear hacia atrás por Coroso. Como si todo en esta vida no fuera un conjunto de procesos químicos sucediendo a la vez.

Alejémonos del drama, no hay nada malo en optimizar el uso de estos medicamentos. Pasas por una época chunga y esta vez optas por la pastilla en lugar de 15 sesiones de coaching genérico, te entiendo. No pasa nada. No es malo, no es inmoral, no es debilidad, no es triste: lo único triste es vivir triste.

En mi caso, tras diez meses me bajaron la dosis, ya había roto ese círculo vicioso de amargura en el que residía. Y, al poco, no tomaba nada. Curado. Esto no es una invitación a priorizar el pastillaje ante otras terapias, simplemente racionalicemos usar con tino y sin sentimiento de culpa las herramientas que la ciencia pone a nuestro alcance.