El Concello de A Pobra intensificará el control sobre los vertidos en el polígono

La Voz RIBEIRA / LA VOZ

A POBRA DO CARAMIÑAL

A pesar de las advertencias a las empresas, se ha detectado que continúa habiendo media docena

08 jun 2017 . Actualizado a las 16:56 h.

El Concello de A Pobra ha confirmado que siguen produciéndose vertidos en pluviales en el polígono de A Tomada e intensificará el control sobre las empresas. El alcalde, Xosé Lois Piñeiro, explica que, después de que Augas de Galicia pusiera una sanción de 30.000 euros en abril del 2015 al Ayuntamiento, se ocupó de hablar con las firmas asentadas en el parque industrial y, aunque algunas actuaron para corregir las irregularidades detectadas, sigue habiendo media docena de puntos afectados.

«O principal problema vén do baldeo e limpeza das explanadas, porque en moitos casos van parar aos ríos, e hai outros verquidos que deberían ir á depuradora e acaban directamente nas canalizacións porque do outro xeito resulta máis caro», continúa Piñeiro. El regidor ha anunciado que va a haber un cambio en el protocolo: «Ata este momento achegábase a Policía Local cando había unha queixa e logo Viaqua desplazábase ata o punto para tomar mostras, pero ás veces tardaba un tempo en facelo e ás veces cando chegaba xa non estaba o verquido. A partir de agora, os axentes van vixiar motu propio, van ter material para coller eles mesmos as mostras e unha neveira para gardalas nas dependencias policiais. A idea é detectar de onde veñen e acabaremos facendo un control directo sobre a empresa que o cause, con tomamostras propios para vixiar os verquidos que fai».

Por otra parte, para evitar que el choque osmótico que se produce cuando el agua salada entra en la red de saneamiento y mata a las bacterias que depuran el agua, indicó el regidor, ya se ha llevado a cabo una actuación en As Xunqueiras y otra con la instalación de una válvula bajo uno de los puntos conflictivos, en una de las arquetas que hay en el cruce de los semáforos junto a los jardines Valle-Inclán, «e deron bo resultado, como vimos de comprobar». A estas medidas se sumará una tercera, en otra arqueta que se encuentra en la misma zona pero en el lado contrario, junto a la parada de taxis, en donde se colocará un balón para que cuando suba el nivel del agua tapone la entrada con una válvula.