Cerca de medio millar de personas participaron en dos concentraciones, realizadas en el centro y frente al Concello
24 jun 2017 . Actualizado a las 05:00 h.La comunidad educativa del CEIP Emilio Navasqüés de Cruceiro de Roo, en Outes, se moviliza para intentar evitar el cierre del centro, decisión ya adoptada por la jefatura territorial de Educación y comunicada a la dirección del colegio y a la alcaldía outiense el jueves a media mañana. Esa misma jornada, ya por la noche, progenitores, niños y profesores se desplazaron a la casa consistorial para pedir explicaciones sobre las causas de esta decisión y para demandar el apoyo de la corporación a las acciones de presión que se adopten para impedir que se materialice.
En ese primer encuentro, la alcaldesa, Beatriz Molinos, dijo que había conocido la decisión a la una de la tarde, que lamentaba la medida y que comprendía la preocupación. El portavoz del ejecutivo, Carlos López Crespo, fue más explícito en sus manifestaciones, indicando que desde el Concello se hará cuanto sea posible para preservar y mejorar la calidad educativa de los alumnos de Roo.
No obstante, apeló al diálogo y a la negociación, tanto para intentar que no se cierre el centro como para, si eso llega a producirse, garantizar una escolarización e integración adecuadas en el colegio de A Serra de los niños ahora matriculados en Roo.
Apoyo de otros municipios
La comunidad educativa no está dispuesta a quedarse de brazos cruzados y, ayer al mediodía, tuvo lugar en el Emilio Navasqüés una nueva concentración, en la que participaron cerca de medio millar de personas. En este caso, además de los afectados por el cierre del centro educativo, también estuvieron presentes numerosos vecinos, así como representantes políticos de Outes, Noia y Muros. Muchos de los congregados portaban pancartas y carteles protestando por el cierre de las instalaciones y corearon consignas relativas a este hecho, siendo la más repetida: «Do Emilio Navasqüés non nos moverán».
La directora del colegio, Mercedes Cereijo, leyó, entre pausas emotivas y alguna lágrima, un comunicado aprobado por el claustro y suscrito por el consello escolar. En el escrito se dice: «Manifestamos o total rexeitamento ao peche do centro, por ser prexudicial para o ben de toda a comunidade educativa. Pechar o colexio implica botar a baixo proxectos que iniciamos coa implicación de toda a comunidade, non fomos alertados antes da posibilidade desta medida tan drástica, e o peche suporá para o alumnado un desvinculamento do seu entorno social e afectivo, con consecuencias dolorosas e graves para o seu desenvolvemento persoal».
Los congregados criticaron especialmente las formas con las que se adoptó la medida de derivar a los niños al CEIP de A Serra.
Hubo padres que recordaron esfuerzos como los realizados por los emigrantes que costearon la primera edificación del Navasqüés, o el de los propietarios de fincas que se desprendieron de ellas para ampliar el colegio o construir el polideportivo. «Todos eses sacrificios dos veciños tíraos por terra unha decisión ilóxica, e converterá nun montón de lixo todo o complexo escolar de Roo».
La movilización realizada en el centro educativo se trasladó después a la localidad de A Serra, donde hubo una concentración frente a la casa consistorial.