Es computable para la Copa de Galicia, trofeo que luce en el Náutico de Portosín
09 jun 2022 . Actualizado a las 20:03 h.El fin de semana del 18 y 19 de este mes se disputará la vigésimo segunda edición de la Regata Ramiro Carregal Rey que, además de ser una de las más atractivas del calendario gallego, esta edición introduce un cambio importante con el fin de imprimirle más interés, y es que, en lugar de realizar el segundo día una prueba barlovento-sotavento, los participantes tendrán que competir en una vuelta a Sálvora, isla fetiche para los habituales de esta competición y para el propio patrocinador, no en vano se efectuaba una regata con el mismo nombre hasta que la ínsula pasó a integrar el Parque Nacional Islas Atlánticas.
Otro valor añadido de esta regata que pone en juego el Gran Trofeo Faro de Corrubedo es que computa para la Copa de Galicia, junto a la Almirante Rodríguez Toubes, la Guardamarina y la Mar de Finisterre.
El comodoro del Real Club Náutico de Portosín, Fernando Gonzaléz, desgranó en la presentación los detalles. El sábado 18 está fijada la salida a las 12.00 frente a las instalaciones de la entidad, en la ría de Muros y Noia. La flota se dirigirá a la ría de Arousa, donde estará la llegada cerca del puerto deportivo del Náutico de Ribeira. González recordó que se trata de una regata que sobresale por las dificultades que tienen que sortear los barcos, especialmente frente As Basoñas (Porto do Son), faro Corrubedo y Sagres (Ribeira).
Añadió que se espera la asistencia de una veintena de barcos, procedentes de náuticos de ambas rías, que se repartirán en las clases crucero, crucero-regata y regata, y habrá un vencedor absoluto que en función de que su puerto base se encuentre al norte o al sur del faro de Corrubedo, el gran trofeo quedará depositado en Portosín (donde está ahora) o en Ribeira (donde estuvo en la edición anterior).
Fernando González avanzó que se espera la asistencia de barcos punteros como, por la zona norte, Siradella, Impresión 3D, Aldebarán y Draco «que están en la Copa Galicia y esperamos que alguno traiga de nuevo el trofeo a Portosín»; por el sur de Corrubedo, citó al Moucho «que cada vez compite mejor», Cámping Ría de Arousa, Ziralla «que vuelve a las regatas después de un impás y es un barco muy competitivo» y el Corsario «que ganó esta regata dos veces».
Como Almanzor
Por parte del Náutico de Ribeira intervino su presidente, José Luis Torres Colomer, quien indicó a Fernando González que no se preocupe por el peso del trofeo, que así como Almanzor se llevó las campanas de Santiago que luego tuvo que devolver, espera que ocurra lo mismo con esta regata y el Gran Trofeo Faro de Corrubedo regrese al Náutico de Ribeira.
Torres Colomer también anunció un hermanamiento a cuatro rías, con Ribeira, Portosín, Bouzas y Portonovo.
Ambos dirigentes destacaron el papel fundamental de Ramiro Carregal para la organización de la regata y para que los dos náuticos sean hermanos. Carregal recordó como nació esa relación entre las dos entidades náuticas «no tenemos nada firmado, pero somos náuticos hermanos, y esta no es solo una regata, es una demostración de amistad».
El presidente de la Federación Gallega de Vela, Manuel Villaverde, agradeció a Ramiro Carregal el apoyo que brinda a la vela y contó la historia de la Copa Galicia, cuyo trofeo se encuentra en Portosín: «La mandó hacer Alfonso XIII y acabó en Inglaterra, hasta que fue recuperada en una subasta. Es de plata y queda depositada cada año en el club del barco que la gane, actualmente, en Portosín».