Nuevos aires para el Encaixe

CARBALLO

ANA GARCÍA

El público respaldó la segunda jornada de la Mostra de Camariñas

18 abr 2014 . Actualizado a las 15:17 h.

«Hay cosas que he visto hoy aquí, aplicaciones del encaje en ciertas prendas y otras cosas, que nunca se me habían ocurrido», comentaba ayer una de las integrantes del jurado del concurso de jóvenes diseñadores poco antes del desfile del grupo A, por la mañana. Llegaba de Almagro (Ciudad Real), donde, además de tener un festival de teatro clásico importantísimo, «también hay mucha tradición encajera». «Pero allí no se hace esto, me llevaré el periódico para comentárselo a nuestro alcalde», bromeó.

Su testimonio da fe del aire fresco que sopla para el encaixe. El de Camariñas y el de fuera de Camariñas, y ya desde hace unos años. Uno lo puede ver estos días (hasta el domingo, incluido) si recorre los estands del polideportivo que acoge desde el miércoles la 24.ª edición de la Mostra. Hay mucho más que tapetes y manteles: están los chalecos y casuchas del puesto de Estonia, los cuadros del estand de Francia o los pendientes del de la República Checa, por citar ejemplos. El efecto llamada del vanguardismo, la palabra con la que los organizadores han querido catalogar la Mostra de este año, surte efecto. Ayer por la mañana, eran muchas las personas que se movían por el espacio expositor, chequeando diferentes técnicas de trabajar con el bolillo y, también, otro tipo de artesanías: la olería de Buño o el telar de lino de la asociación O Santiaguiño de Carreira (Zas) no pasan desapercibidos.

Son 500 palilleiras en vivo (los 5 días) y 13 países representados. Los dos euros de la entrada (tres, con desfile) aseguran ver pasar las tendencias mundiales del encaje desde su capital: Camariñas.