El temporal remite, pero deja un reguero de daños aún sin reparar

Xosé Ameixeiras
X. AmeiXeiras CARBALLO / LA VOZ

CARBALLO

Ana Garcia

Suspendidas las clases en el Otero Pedrayo de A Laracha porque voló parte del tejado

06 feb 2017 . Actualizado a las 14:30 h.

La Costa da Morte recuperó ayer la calma después de los golpes recibidos a causa del temporal, que, aunque remite, deja un reguero de daños en infraestructuras públicas y privadas en muchos casos aún sin evaluar. Sin embargo, hay localidades que todavía no recuperaron la normalidad. Es el caso de Follente (Mira-Zas), donde un rayo destrozó una caja del servicio telefónico y dejó sin servicio a las localidades de la redonda. El vecino Braulio García comentaba ayer que muchos de los electrodomésticos de quince viviendas quedaron inservibles. En el colegio Otero Pedrayo de A Laracha, miembros del equipo directivo descubrieron los destrozos provocados por el viento en el lucernario de las aulas de primaria. Parte de la estructura de aluminio y metacrilato estaba esparcida por el patio. Todo ello obligó a suspender las clases de hoy.

En Muxía, Protección Civil retiró árboles en Bardullas y un poste de telefonía en Espiñeirido. En Centiña (Coristanco) retirarán hoy un pino que quedó incrustado sobre un roble. En Oca eliminaron el suministro al cable que quedó atravesado sobre la vía para que puedan pasar los autos.