«Se podo, xa morro aquí», asegura sobre su nueva estancia carballesa

La Voz

CARBALLO MUNICIPIO

04 mar 2017 . Actualizado a las 05:00 h.

Sevillano de nacimiento y grancanario de casi toda su vida adulta, sus recientes años gallegos le permiten entender sin problemas el idioma, e incluso atreverse con algunas palabras o expresiones: «Se podo, xa morro aquí», comentaba ayer, en la vivienda que ocupa en Sísamo, gracias a la ayuda que le presta la parroquia. Como tantos transeúntes que pasan por Carballo, la primera visita fue a Cáritas, donde le facilitaron lo básico, además del acomodo en el albergue en el que se pueden pasar tres noches como máximo. Supo de Carballo cuando estaba en Santiago, la semana pasada, gracias a un compañero de Coristanco que le indicó el destino.

Teniendo en cuenta sus habilidades con la albañilería, la carpintería y similares, y sabiendo además que esa vivienda necesita unos arreglos, se juntaron el hambre con las ganas de comer (dicho sin doble sentido), además de la buena disposición de ambas partes.

«Un palacio»

No es sencillo encontrar acomodo en estas condiciones, salvo que se reúnan una serie de características. «Aquí estoy muy bien. Esto es un palacio, y ahora mismo estoy limpiando», relataba ayer a media tarde. La casa tiene huerta, un aliciente más para sentirse a gusto. Ya la tenía en Cortegada, donde está su hija y su nieto. También se ha movido por varios establecimientos carballeses en busca de trabajo, y han quedado en avisarle si surge algo. Sabe que no va a ser fácil, pero añade que por intentarlo no va a ser. «A mí esto me encanta, me he enamorado de este lugar», añade. De Galicia, en general, y de la gente con la que ha tratado, habla maravillas.