No hace tanto, las bonificaciones que el Concello de Carballo concedía a las empresas que se instalaban en el polígono de Bértoa llegaban a cuentagotas. Bonificaciones en forma de exenciones del 95 % del pago del Impuestos de Construcciones, Instalaciones y Obras, que no es que sea lo principal, pero supone unos buenos ahorros (y un incentivo: así fue pensado en su momento) para las pequeñas y medianas empresas que ya tienen bastante con pagar religiosamente los créditos. Cuanto más inversión, más ahorro, porque el ICIO anda por el 2 % del total, que así se queda en muy poco. Pero esos goteos empiezan ser la lluvia fina y constante, por suerte para el tejido industrial de Carballo y la consiguiente creación de empleo. De noticia ha pasado a rutina. Empieza a ser complicado hacer cuentas, no como al principio, cuando casi se sabían de memoria las cifras. Pues la semana que vine, más. El pleno (como estamos en fiestas no será este lunes, sino que se aplaza hasta el miércoles) aprobará la concesión de cuatro nuevas bonificaciones en el parque empresarial (y otra más para un centro de especialidades en la Avenida das Flores): una carpintería de madera que invertirá 254.000 euros; otra de productos químicos, con 238.000 euros en el proyecto; otra de carpintería metálica de 198.000, y una agroindustrial mayor que las anteriores, con 1,4 millones de euros de presupuesto.
A estas cuatro, se unen las de plenos más recientes, y en lo que va de año suman ya 13 bonificaciones para otras tanta iniciativas industriales, según los datos que dio ayer a conocer el alcalde, Evencio Ferrero, cuando presentó los asuntos de la sesión del próximo martes. Así que igual no andaba muy desencaminado cuando hace pocas semanas auguraba que, en pocos años, tal vez no más de cinco, el polígono se queda pequeño ya haya que ir preparando una segunda fase. ¡Quién lo diría hace apenas cuatros años, cuando los tojos copaban casi la totalidad del parque! Cierto que en algunas parcelas aún ocurre, pero a este ritmo la desbrozadora no tardará en llegar a ellas. La claves, es evidente, no está e lo que se ahorran del ICIO, sino en la importancia estratégica del polígono, la lenta, pero parece que real recuperación económica, y la venta a mitad de precio de las parcelas. Todo suma, y el polígono de Carballo vive un momento excepcional que, puestos a pedir, pudo haberle llegado antes.
Otros no venden tanto, pero cuando lo hacen destacan. Véase lo que ha pasado con Inditex en A Laracha, con una inversión prevista de más de 57 millones de euros. Además de lograr una rebaja del 25 %., gracias a ese 95 % de bonificación deja de pagar a las arcas municipales un millón de euros. ¡Esas sí son cifras!