Los empresarios coruñeses apoyan el plan industrial de Ferroatlántica

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Reclaman a la Xunta y los partidos que permitan la venta de las centrales del Xallas

18 abr 2017 . Actualizado a las 05:00 h.

El comité ejecutivo de la Confederación de Empresarios de A Coruña mostró ayer su apoyo al plan industrial de Ferroatlántica, con una inversión de 102 millones de euros que «busca no solo la eficiencia y la competitividad de la citada compañía, sino la creación de 200 empleos directos y otros 300 indirectos en la provincia de A Coruña».

Este posicionamiento llega después de la reunión mantenida ayer por la tarde por el director financiero de Ferroglobe, José María Calvo-Sotelo Ibáñez-Martín, en la sede de la Confederación, donde el ejecutivo fue recibido por su presidente, Antonio Fontenla Ramil.

El comité ejecutivo entiende que esta apuesta industrial de Ferroglobe «se ejecutaría en un momento clave y abre un futuro ciertamente prometedor. Por el contrario, de no llevarse finalmente a cabo supondría un grave problema para el conjunto de la economía de la provincia, especialmente en una zona como la de Cee, que fue severamente castigada por la crisis y que registra una pérdida permanente de tejido industrial».

Advierte también, como ya dijo en repetidas ocasiones la propia empresa, que de no llevarse a cabo la operación se sucederían recortes, «el primero de los cuales sería el cierre de la planta de silicio solar de Sabón, en la que trabajan más de 30 operarios».

Según le explicó Calvo-Sotelo a Fontenla, la inversión prevista, 102 millones en total, haría de la planta de Sabón un «referente mundial en la fabricación de silicio solar», al tiempo que las fábricas de Cee-Dumbría «se verían reforzadas industrialmente, por lo que ganarían capacidad de producción».

«Absolutamente prescindibles»

Asimismo, el director financiero de Ferroglobe puso de manifiesto que «con la nueva normativa que regula el sector eléctrico, las centrales hidráulicas han perdido su carácter estratégico para el negocio de ferroaleaciones, por lo que son absolutamente prescindibles».

En base a todo ello, el comité ejecutivo de los empresarios coruñeses le solicita a la Xunta «que levante una cláusula restrictiva, introducida a principios de los años 90, que impide la segregación de las centrales hidráulicas, por considerar que, tras los cambios habidos en la normativa que regula el sector eléctrico, atenta contra la libertad de mercado».

La patronal provincial también hace un llamamiento a la responsabilidad del resto de las formaciones políticas y a la sociedad civil para que se sumen a la iniciativa, apoyen el plan industrial y «evitar así que una empresa a la que en la actualidad están vinculados más de quinientos empleos caiga en una situación crítica».

Ferroglobe ya adelantó que a lo largo de esta semana le presentará al gobierno autonómico la solicitud formal para la segregación de las actividades. Esto le permitiría cumplir su compromiso de venta de las centrales a la canadiense Brookfield por 255 millones de euros, con los que aliviaría su complicada situación financiera y podría implementar el citado plan de inversiones.

Cee-Dumbría, en contra

Aunque la empresa tiene el apoyo de los sindicatos a nivel estatal para enajenar sus activos hidroeléctricos del Xallas y el Grande, en la Costa da Morte no cuenta con el respaldo del comité de Cee-Dumbría, cuyos delegados de UGT y CC.OO se desvincularon de sus respectivos sindicatos, a los que acusan de traición.

También el Parlamento de Galicia y todos los alcaldes de la Costa da Morte se han posicionado contra la segregación.