El Carrumeiro celebra su aniversario con el proyecto en estudio por parte de Portos
14 abr 2017 . Actualizado a las 08:55 h.Con esa ilusión, la de tener un puerto deportivo, nació en el verano de 1977 el Club Marítimo Carrumeiro de Corcubión, uno de los náuticos más antiguos de Galicia que celebra su 40 aniversario. Y ahora el presidente de Portos de Galicia, José Juan Durán, le acaba de confirmar el encargo del estudio de viabilidad para su futura construcción.
La infraestructura, en principio prevista para la zona de la Viña, entre el muelle actual y el antiguo de los carboneros, cuenta con el respaldo de los alcaldes de Cee, y que, con un abrigo al sur y otro al norte, cumpliría una doble función. «Es una aspiración compartida entre nosotros y la cofradía, porque la línea de fondeo es ya demasiado pequeña para los barcos que hay. Además, la construcción del Relleno de Cee y del puerto de Brens produjo cambios de las corrientes y la sedimentación de la arena. En total calculamos que se pueden hacer unos 200 amarres, para tercera y séptima lista», explica Félix Quinteiro Álvarez, que fue fundador del club, se puso al frente hace dos años y ostenta el carné de socio número uno.
La necesidad de unas instalaciones náuticas en condiciones en la ría de Corcubión es más que evidente y reconocida desde todos los ámbitos, aunque ya pocos se fían de verla hecha realidad algún día, porque estaba en los planes del bipartito, se daba por hecho, y a día de hoy aún sigue pendiente. Para Quinteiro, que todo lo hace en el náutico, al igual que sus antecesores, trata de que sea inclusivo y abierto, es de destacar que hayan recibido el apoyo de los regidores y de todos los partidos políticos, tanto en Cee como en Corcubión.
Necesidad
«Ha sido desde siempre nuestra aspiración y es el que falta, porque entre Camariñas-Muxía y Muros no hay ningún puerto deportivo -salvo O Ézaro, pero tiene el puente y unas características especiales que lo hacen depender de las mareas- y desde que nosotros empezamos ya se han construido 39 en Galicia. Lo entendemos como un derecho histórico, pero queremos justificarlo con fundamentos técnicos y de necesidad», sostiene el presidente del Carrumeiro.
Pese a esta carencia, en 40 años el club ha alcanzado hitos importantes, como demuestra que cada año más de 300 chavales, a través de O Mar na Escola y otras iniciativas, se acerquen al mundo de la vela. En ello, Quinteiro le da un mérito central a Noemí Bermúdez de Castro Elorza, la monitora y alma de Cataventos. Al mismo tiempo, en el balance de estas cuatro décadas, quiere recordar especialmente al ya fallecido, Jesús Elorza, nombrado presidente de honor de la entidad, que encabezó durante años.
En estos momentos el Carrumeiro cuenta con algo más de 100 socios que pagan sus carnés, una cifra nada desdeñable si se tiene en cuenta que no hay unos amarres vinculados y que está abierto a todo el mundo. Ni siquiera los padres de los niños que acuden a las actividades tienen obligatoriedad de afiliarse. Mucha de esa gente está fuera de Corcubión, por motivos laborales, familiares y de otra índole, pero siguen apoyando algo que sienten como propio. Ahora la idea es que buena parte de ellos puedan juntarse en la churrascada veraniega que esta vez sabe a 40 años de historia.