Los lectores de La Voz ya alertaban hace 50 años de los problemas de visibilidad que provocaban los autocares que estacionaban junto al palacete
22 jun 2017 . Actualizado a las 05:00 h.El sábado 21 de junio de 1967, entre anuncios de verbenas de San Juan y estrenos de cine, La Voz de Galicia publicaba en la sección Buenos días un comentario titulado «Una parada peligrosa». Así decía la noticia: «Nos apuntan algunos lectores la conveniencia de que la parada que de autobuses existe ante el palacete enclavado en la plaza de Orense se situase unos cincuenta metros antes o después del mismo. Según parece ha habido ya varios casos en los que a poco se registran accidentes, y esto debido a la carencia de visibilidad existente desde el momento en que un autobús estaciona a dejar o tomar alguna persona. Debido a sus grandes dimensiones impiden que el conductor que en un vehículo se dirige a Sánchez Bregua o Linares Rivas pueda ver que desde el cruce de la misma plaza de Orense sale otro vehículo».
«Esto es, indudablemente, un peligro que parece sumamente fácil de solucionar», apuntaba aquella nota de hace 50 años. Se ve que hace medio siglo la plaza de Ourense ya era un punto difícil para el tráfico.