Cero Cuatro, el gimnasio «tres en uno» que se adapta para lesiones medulares, ictus o patologías neurodegenerativas

Alejandro García Chouciño
A. G. CHOUCIÑO A CORUÑA

A CORUÑA

Adrián García, del área de neurorrehabilitación, en el centro, con el resto del equipo
Adrián García, del área de neurorrehabilitación, en el centro, con el resto del equipo Marcos Miguez

El centro especializado cuenta con maquinaria adaptada para tratar todo tipo de dolencias de la forma más segura

09 mar 2024 . Actualizado a las 05:00 h.

En apenas cinco meses de vida, el centro Cero Cuatro, especializado en fisioterapia, neurorrehabilitación y entrenamiento personal, ha ganado peso en la ciudad gracias a sus planes de prevención, recuperación y mantenimiento de la salud. «Lo que más nos está llegando en la parte de neurorrehabilitación son personas con párkinson e ictus. También vinieron pacientes con parálisis cerebral, otras enfermedades neurodegenerativas y una lesión nerviosa por una hernia discal», explica Adrián García, uno de los profesionales que trabajan en el centro situado en la calle Magistrado Manuel Artime.

García resalta que en la clínica cuentan con «tres gimnasios diferentes. Los tres espacios se comparten, pero realmente hay uno que es específico del área de neurorrehabilitación y cuenta con maquinaria adaptada. Principalmente para que se puedan realizar ejercicios de forma segura. Tenemos un sistema que descarga el peso de los pacientes para que les cueste menos esfuerzo moverse. También un sistema que asiste en la marcha a las personas cuando no son capaces de caminar por sí mismas. O dispositivos que miden la frecuencia cardíaca porque tenemos muchos pacientes con patologías cardiovasculares».

En este sentido, dependiendo de la patología que tenga el usuario cambia mucho el enfoque. «Habría como dos grandes campos. Están lesiones como un ictus o un daño medular, en las que trabajar en la fase inicial es fundamental. En el caso del ictus son los seis primeros meses, y en las lesiones medulares, el primer año. Apostamos por un planteamiento intensivo con muchas horas de rehabilitación semanales y muy intensas. Basadas principalmente en el ejercicio físico, en la máxima intensidad que el paciente soporte. Después hay otro campo muy grande, que es el de las enfermedades neurodegenerativas. La más frecuente es el párkinson, pero también se incluyen la esclerosis múltiple, el alzhéimer... Aquí el enfoque es más para acompañar a la persona a lo largo de la enfermedad, con menos sesiones semanales, y para reducir la progresión de la patología y mejorar la calidad de vida lo máximo posible mientras se pueda», resume García.

El fisioterapeuta también destaca que hacen sesiones personalizadas y de grupos reducidos de hasta cinco personas. «Cuando una persona viene, lo primero que hacemos es realizarle una valoración a través de distintas pruebas. Miramos la capacidad física de la persona y, a partir de ahí proponemos un plan de tratamiento. Y para aquellas personas más autónomas, este plan de tratamiento incluye sesiones en grupos reducidos en las que hay un terapeuta que supervisa que todo se realice de forma correcta, pero que no está todo el tiempo encima de la persona. En aquellas personas que tienen un mayor grado de dependencia esto no se puede llevar a cabo entonces solo se pueden realizar sesiones individuales», matiza.