Betanzos fue una fiesta con el Camino Inglés

Cristóbal Ramírez EL EXPERTO

BETANZOS

Representantes de los 18 municipios por los que pasa el Camino, y otros de la Xunta, escenificaron la unidad en torno a esta vía

02 may 2017 . Actualizado a las 22:38 h.

El sábado Betanzos fue una fiesta a la que ayudó, desde luego, el escenario -la plaza García Hermanos- y el magnífico tiempo, incluso un poco inclemente con tanto sol. Representantes de los 18 municipios por los que pasa el Camino Inglés, y otros de la Xunta, se dieron cita para escenificar la unidad en torno a una vía de peregrinación que cada año es más recorrida. El alcalde local no podía ocultar su satisfacción.

Resulta difícil calcular el número de personas que acudieron a ese encuentro, donde abundaron las degustaciones gratuitas de productos típicos de cada concello («Menos mal que Miño non ofreceu probar as súas cebolas así en seco», comentaba alguien irónicamente). Miles, en todo caso. Y la abundancia de visitantes, asombrados peregrinos incluidos, era condición necesaria pero no suficiente para el éxito de una iniciativa de la Diputación, con el concejal orosino Antonio Leira a la cabeza.

La condición suficiente era que cuajara un doble sentimiento: que el reloj se ponía en marcha a partir del minuto 0 y que el viaje que comenzaba en esa simbólica plaza había que hacerlo todos juntos. La impresión es que se entendió que esa idea tan gallega de ir por libre lleva a una vía muerta.

Hay, además de un argumento histórico, uno económico. Sin salir de Betanzos, la antigua capital de provincia dio el año pasado algo más de 10.000 desayunos y algo más de 10.000 cenas. ¿De verdad algún municipio quiere quedarse en tierra?

El sábado se entendió que esa idea tan gallega de ir por libre lleva a una vía muerta