La iniciativa del artista Eduardo Hermida vinculará a los barrios de A Coruña y Ferrol
04 may 2016 . Actualizado a las 18:25 h.«Son dos barrios con raza», afirma el pintor Eduardo Hermida. Monte Alto y Canido, dos zonas muy populares y que están experimentando una nueva vida, hermanarán a las ciudades de A Coruña y Ferrol a través de la iniciativa artística de las Meninas, un proyecto de arte callejero y reivindicativo que se ha convertido en referente internacional de intervención para la recuperación de espacios urbanos degradados. El artista ferrolano Eduardo Hermida, promotor de la idea, tiene el compromiso del Ayuntamiento de A Coruña para realizar este año la iniciativa artística en los muros de Monte Alto, lo que servirá, además, para establecer lazos entre los dos barrios.
«Es una idea que tengo desde hace tiempo. Son dos barrios con muchas similitudes y a los que yo estoy muy vinculado. En Canido es donde nací y donde vivo y trabajo y en Monte Alto tuve también mi estudio», apunta Hermida. Las Meninas de Canido nacieron hace ya ocho años con la idea de llenar de color los muros de viviendas abandonadas en un barrio entonces en un profundo proceso de abandono. La idea mezcla la reivindicación, el arte y la fiesta. Con el tiempo, más de doscientos artistas han plasmados sus interpretaciones del cuadro de Velázquez en las paredes del barrio.
Las Meninas de Monte Alto, cuyo proyecto se concretará en fechas próximas, además de acercar a dos barrios con similitudes geográficas y que se han convertido en los últimos años en lugares de residencia de mucha gente joven y espacio de creadores, vinculará a Picasso y la ciudad de A Coruña con la idea inicial. Picasso, que se inició como artista en esta ciudad, fue uno de los máximos exponentes de la historia del arte en la reinterpretación de la obra magistral de Velázquez. En Canido se celebrará la nueva edición el primer fin de semana se septiembre y en Monte Alto, el segundo. Se implicará a pintores, músicos y vecinos del barrio coruñés y se pensarán acciones concretas para formalizar el intercambio entre los barrios.
La repercusión alcanzada por las Meninas de Canido se ha traducido también en la aprobación por el pleno de Madrid de desarrollar en varios distritos de la capital una iniciativa similar, que contará con el asesoramiento del propio Eduardo Hermida.