El joven salvado del mar en A Coruña dificultó su rescate cuando se acercaron los policías
A CORUÑA CIUDAD
Tres personas que se lanzaron al mar para ayudar a Diego Sanmiguel precisaron atención médica
26 jun 2016 . Actualizado a las 15:40 h.El protagonista del San Juan coruñés fue un joven de 21 años natural de Buriz (Guitiriz, Lugo) que se metió en el mar cuando estaba terminantemente prohibido hacerlo y que con su actitud puso en peligro su vida, además de la de los tres agentes de la Policía Local que se lanzaron a las olas del Orzán para rescatarlo, Javier Velilla, Gerardo Riobó y Joaquín Ponte, y la del coordinador de Seguridad Ciudadana, Carlos García Touriñán, que tuvo que ser atendido tras participar en la cadena humana se montó -con personal de Protección Civil y Cruz Roja- y que finalmente sirvió para sacar a todos del mar.
Tras pasar por centro médico, Diego Sanmiguel Vázquez fue detenido y prestó declaración en dependencias de la Policía Nacional, quedando después en libertad. En el atestado consta que las 7.50 horas de la mañana varias personas alertaron de que había un joven bañándose en la Coraza del Orzán. Los agentes fueron inmediatamente al lugar y le advirtieron que estaba prohibido bañarse, indicándole que tenía que salir inmediatamente del agua «haciendo caso omiso dicho joven, pese a la insistencia y reiteración de los agentes».
Estos decidieron lanzarse al agua cuando comprobaron que el joven empezaba a tener dificultades para salir a flote. En principio saltaron dos, y «sufrieron complicaciones para mantenerse a flote ellos mismos, toda vez que cuando lograban acercarse al joven, este se hacía el muerto y otras maniobras que complicaban su rescate, teniendo que acudir otro agente a socorrer a ambas partes».
A esa hora el estado del mar complicaba las cosas y «hacía prácticamente imposible acercarse a dicho joven y a los agentes». En la memoria de todo estaba todavía el caso de Tomas Velicky, un estudiante que en el 2012 perdió la vida bañándose en la playa, y en cuyo intento de rescate fallecieron otros tres policías nacionales que intentaron salvarlo.
«Temiendo por sus vidas», dice el atestado, se desplegó «una cadena humana para poder rescatar a las partes, dado que el mar arrastraba hacia el interior a la gente que se encontraba en el lugar».
Acabado el rescate el joven fue detenido por incumplir la orden que prohibía el baño y por desobedecer a los agentes «poniendo en peligro, además de su propia vida, la de los agentes que acudieron a rescatarlo».
Sanmiguel, que no presentaba signos de intoxicación etílica, indicó que estaba con unos amigos cuando decidió meterse en el mar, y aseguró «que no tenía idea de suicidio». Dos agentes y el coordinador de Seguridad precisaron atención médica.