La Xunta aprueba que los buses lleguen al centro pese a las críticas de María Pita

Xosé Vázquez Gago
Xosé Gago A CORUÑA / LA VOZ

A CORUÑA CIUDAD

El gobierno local no se opuso en la última reunión, pero ahora habla de «imposición»

19 may 2017 . Actualizado a las 05:00 h.

El Consello da Xunta aprobó ayer el plan para que 43 líneas de transporte interurbano hagan paradas en el centro de la ciudad.

El proyecto lleva en discusión desde el 2013 y ha sido sometido a exposición pública dos veces.

La Xunta insiste en que el plan ha sido consensuado con los ayuntamientos participantes, mientras que el gobierno local de A Coruña insistió en pedir «diálogo» y acusó a la Administración autonómica de intentar «impoñer» el texto sin un acuerdo.

María Pita se basa en que la Xunta «rexeitou de xeito completo ou parcial 9 das 11 alegacións» que presentó. Según el titular de Mobilidade Sostible, Daniel Díaz, esas reclamaciones estaban pactadas «coa maior parte dos consistorios da área metropolitana».

Sin embargo, en el escrito de alegaciones no figura la firma de ningún representante de otro ayuntamiento. Por otra parte, en la última reunión de la comisión de seguimiento del plan de transporte metropolitano, celebrada el 19 de abril con presencia de 16 representantes municipales, ninguno rechazó a la puesta en marcha del proyecto, que se aprobó sin oposición alguna.

El objetivo del plan es fomentar el uso del transporte público y reducir la circulación de vehículos privados en la ciudad.

Sus potenciales beneficiarios son los casi 4,75 millones de ciudadanos que cada año viajan entre la ciudad y uno de los 12 ayuntamientos cuyas líneas han sido incluidas en el documento.

Se trata de los municipios de Oleiros, Culleredo, Arteixo, Cambre, Sada, Betanzos, Carballo, Carral, A Laracha, Bergondo, Abegondo y Cerceda, que están integrados en el Área de Transporte Metropolitano de A Coruña.

Cuando el plan se lleve a la práctica, los buses procedentes de esos ayuntamientos podrán parar en cinco puntos del centro, dependiendo del acceso que utilicen para entrar en la ciudad.

Los que lleguen por la avenida de Finisterre podrán detenerse en la plaza de Pontevedra y, en sentido salida, en Juan Flórez.

Los que accedan por la avenida de Arteixo podrán detenerse, tanto en sentido de entrada como de salida, en la Palloza, la plaza de Ourense y Entrejardines. Si entran por la avenida del Ejército o por Alfonso Molina harán ese mismo recorrido, aunque en el último caso también se detendrán en la estación de autobuses.

Si los objetivos del plan se cumplen, la Xunta calcula que se producirá un incremento del 10 % en los usuarios del transporte público de las líneas afectadas.

Eso supondría una reducción en la entrada de vehículos privados a la ciudad de 600 cada día.

La Xunta sostiene que la incidencia del plan en el tráfico urbano «é insignificante», y considera que incluso podría mejorar.

La Administración autonómica se basa en la citada reducción del tráfico privado y en diversas simulaciones de circulación.

En esos informes se señala que los nuevos autobuses que podrán circular por Linares Rivas o Entrejardines suponen un incremento del 1 % y del 1,6 % sobre el tráfico habitual en esas vías.