La norma para anular las multas de la ORA entrará en vigor tras año y medio

El pleno del Ayuntamiento de A Coruña aprobará en su próxima sesión ordinaria la anulación de multas de la ORA. Se trata de una de las principales novedades del nuevo contrato de gestión de ese servicio, que tramitó en su mayor parte el PP y adjudicó la Marea -tras renunciar a la posible municipalización del servicio- durante el verano del 2015.

La nueva empresa gestora, Setex-Aparki, comenzó a trabajar a finales de aquel año, y el gobierno local apostó por aplicar de manera más firme la ordenanza, con el objetivo de facilitar la rotación de aparcamientos.

Pero durante los primeros meses del 2016 se produjo un efecto secundario: los conductores todavía no estaban acostumbrados a la nueva disciplina y muchos recibieron, de una sentada, hasta 23 sanciones de la ORA.

Superado ese período, durante el que llegaron a imponerse hasta 200 multas al día, el número de sanciones se estabilizó en cerca de 80 al día, una cantidad similar a las que impone la Policía Local por otras infracciones.

Mientras eso ocurría, los trámites administrativos para facilitar la anulación de sanciones seguían estancados. El gobierno local no presentó una propuesta para implantarla hasta agosto del 2016, y el asunto no llegó a pleno hasta enero de este año. Fue rechazado por PP y PSOE, mientras que el BNG se abstuvo. Toda la oposición fue muy crítica con un texto que tacharon de «recaudatorio» o «falto de ambición».

Tras sufrir algunas modificaciones, la propuesta volvió a pleno el 6 de febrero, y fue aprobada con los votos favorables de la Marea, el PSOE y el BNG. El PP mantuvo parte de sus críticas, pero optó por la abstención.

La principal polémica entonces fue quién percibirá el recargo que paguen los conductores para evitar las multas, el Ayuntamiento o la empresa gestora. El gobierno local y el propio alcalde han subrayado que el dinero terminará en las arcas municipales.

Pero los pliegos del contrato indican que los ingresos le corresponderán a la concesionaria, y añaden que la recaudación de los parquímetros, donde se pagará el extra para evitar la sanción, se considerarán como ingresos. Desde el punto de vista de la empresa, el pago por anulación es una tarifa, por lo que encajaría en los ingresos reglados.

Ante las dudas, el gobierno local requirió informes al interventor y a la asesoría jurídica en los que se concluye que esos fondos deben ser municipales, aunque no está descartado que la empresa gestora acuda a los tribunales para dirimir su destino definitivo.

Una vez aprobada la normativa de forma inicial, el 6 de febrero se abrió el plazo de alegaciones. Solo se presentó una, por parte de una ciudadana particular, que pedía que se aclarase el sistema sancionador, de forma que fuesen los vigilantes de la ORA los que denunciasen las infracciones. El gobierno local considera que debe ser desestimada, aunque la decisión corresponde a la Comisión de Mobilidade Sostible, que se reunirá el martes, antes del pleno en el que la norma debe aprobarse de forma definitiva. Está previsto, salvo novedad, para el lunes 5 de junio.

El pleno y la entrada en vigor

Todo indica que la nueva normativa obtendrá el aval del pleno, dadas las votaciones de la sesión de febrero -Marea, PSOE y BNG a favor, PP abstención- y que ningún partido de la oposición presentó alegaciones.

Una vez superado el trámite, solo quedará que la norma sea publicada para su entrada en vigor. A partir de entonces los infractores podrán pagar entre 1,5 y 6 euros para evitar las sanciones -que en la mayoría de los casos ascienden a 60 euros- por estacionar sin el tique necesario o durante más tiempo del permitido.

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