Así será el paseo para conectar con el mar en As Xubias, en A Coruña

Ana González Núñez
Ana González A CORUÑA / LA VOZ

A CORUÑA CIUDAD

ANGEL MANSO

La propuesta plantea configurar un camino natural con arbolado y fomentar los aspectos patrimoniales de la zona

08 abr 2024 . Actualizado a las 09:25 h.

Pasear por As Xubias, en A Coruña, y ver un paisaje de costa exclusivo van de la mano. Este barrio es una de las joyas de la ciudad justo en su entrada, pero se encuentra descuidado. El Ayuntamiento ha planeado durante años el futuro de esta zona colindante a la ría, que pasará por construir un paseo de unos dos kilómetros que una la playa de Oza con el puente de A Pasaxe. Así lo refrendó esta semana la alcaldesa, Inés Rey, quien anunció que crearán una gran senda verde, ya liberado el terreno del poblado chabolista de A Pasaxe. Existe una propuesta municipal para la zona que planea fomentar los aspectos patrimoniales y aumentar el arbolado.

La idea de terminar este paseo se comenzó a gestar en el 2008, pero no se ha llevado a cabo en estos 16 años por la existencia de varios obstáculos. Algunos se han ido resolviendo. El primer paso fue la demolición en febrero del año pasado del esqueleto urbanístico que llevaba 40 años estropeando el paisaje de As Xubias.

Fin De las infraviviendas

El asentamiento chabolista de A Pasaxe ya es historia. El mayor inconveniente también ha desaparecido. Se trata del asentamiento chabolista de A Pasaxe, cuyo último habitante fue desalojado el jueves tras un largo proceso judicial. El poblado formado en 1986 en el terreno de la antigua conservera Celta ya es historia, después de que el Concello lograra reubicar a las familias en viviendas. Fue solo un hombre el que se resistió con empeño a irse y no aceptó ninguna de las ofertas que le hicieron. El pasado domingo expiró el plazo legal que se había establecido para que retirase sus enseres, por lo que fue desalojado el jueves y su chabola demolida. Ese día se evaporaron más obstáculos para despejar la zona, con el derribo de tres antiguas edificaciones de Costas que estaban okupadas, dos detrás del hospital materno y una debajo del puente de A Pasaxe. Ahora, el Gobierno central planea hacer un espacio con zonas verdes y abrirlo al público, una actuación que será financiada con cargo a una partida de 2,3 millones de fondos europeos para la provincia. Luego configurará la senda litoral de la mano del Ayuntamiento.

Valor paisajístico

Una puerta de entrada «que tienen muy pocas ciudades». La necesidad de intervenir en As Xubias se produce por su «enorme valor paisajístico». La prestigiosa arquitecta Isabel Aguirre de Urcola indica que esta zona «es la verdadera entrada a A Coruña bordeando el mar». «Un acceso como el de Alfonso Molina lo tienen muchas ciudades, pero la fachada de As Xubias es una puerta importantísima, una imagen que tienen muy pocos lugares», subraya la paisajista, que lamenta que la zona «está muy abandonada». Por eso, incide en la importancia de crear «un paseo amable por el que entrar a la ciudad, una alameda al borde del mar». Y así lo prevé el proyecto del Ministerio para la Transición Ecológica, que incorporará variedades arbóreas como plátanos, arces chopos y liquidámbares.

Con cuidado

Piden un camino que respete la relación con el mar. «El paseo sería una intervención buenísima, pero tiene que ser tratada de una manera muy especial, muy cuidadosa. No puede ser una autopista para peatones», advierte Aguirre de Urcola, que propone incluir arbolado y zonas ajardinadas, en las que «huela a mar». También la profesora de Paisaje de la Escuela Técnica Superior de Arquitectura de la UDC Cristina García Fontán coincide en que se debe huir del asfaltado y realizar «una senda natural, un espacio para caminar, aunque no puede tener un mismo tratamiento de principio a fin, pues en algunas zonas se requerirá un pavimento duro y en otras, natural, con anchos variables», porque la situación de la costa dificulta la construcción de un camino al uso. «Lo ideal sería unir los jardines con el puente de A Pasaxe, atándolo con el puerto. Lo está pidiendo el trazado de la ciudad», asegura Isabel Aguirre, pero reconoce que es una actuación «de mucha complejidad». Con todo, insiste en potenciar «la relación con el mar» y propone recuperar la embarcación que cruzaba del núcleo de As Xubias a Santa Cristina.

Vista aérea de la ría.
Vista aérea de la ría.

El recorrido de la senda natural partirá de la playa de Oza y llegará a la pequeña península en la que está el Centro de Educación Especial María Mariño, una zona que genera discrepancias por sus rocas y vegetación en contacto con el mar, por lo que podría hacerse un paseo voladizo o estudiar soluciones similares. Después está el núcleo de As Xubias, que cuenta con un pequeño arenal y edificaciones con historia, por lo que se deben analizar las posibilidades de trazado. Superada esta parte, se encuentra la zona trasera del materno, con un terreno casi sin urbanizar que ofrece cuantiosas posibilidades, y luego el colegio Santa María del Mar, separado de la ría por la vía férrea. Finalmente, el paseo terminará en una gran zona liberada: el ya antiguo asentamiento chabolista. La senda también deberá resolver la presencia de varias empresas. Una de ellas continúa desarrollando su actividad junto al asentamiento desmantelado.

Un suelo industrial

Proponen deshacerse del relleno de A Pasaxe. Otra de las polémicas se plantea en esta explanada de 20.000 metros cuadrados. La profesora Cristina Fontán apuesta por reflexionar sobre si se debe «mantener el relleno que se utilizó en esa zona que tenía un uso industrial» y que tiene restos de contaminación. «Recuperar el terreno para la ciudad está bien, pero hay que pensar si hay que devolver una parte a la ría, volver a naturalizarla, porque esta área ya está afectada por las líneas de máxima inundación», alerta la también coordinadora del grupo de investigación de la UDC Persona Ambiente, que plantea generar «procesos de desurbanización de ese espacio», para evitar esa afección.

Cristina García Fontán, que estudió recientemente el lugar con sus alumnos, asegura que un punto importante a la hora de hacer el paseo es «el tratamiento de los bordes para que la transferencia de agua dulce y salada sea a través de un medio natural», es decir, se debe trabar la orilla para facilitar el contacto con el agua. «Las soluciones que renaturalicen harán que la zona responda mejor a la subida del nivel del mar y al cambio climático», dice la experta.

Patrimonio cultural

El Ayuntamiento aumentará los elementos protegidos. Los elementos catalogados en la zona son el Pazo Guyatt y el de los Blanco, así como el conjunto de casas marineras de As Xubias de Abaixo, el colegio Santa María del Mar y la Casa Grande. También gozan de gran valor patrimonial los muelles más cercanos al hospital, la casilla ferroviaria junto a A Pasaxe, que en el pasado fue una parada de tren, el tramo empedrado de la N-6 que hay junto al desvío hacia la zona industrial y el apeadero de A Pasaxe que ahora alberga viviendas.

La alcaldesa de A Coruña, Inés Rey.
La alcaldesa de A Coruña, Inés Rey. Marcos Míguez

Inés rey, alcaldesa de A Coruña: «Ya es factible hacer proyectos sobre la senda» 

La alcaldesa, Inés Rey, calificó de «día histórico» la jornada del jueves, en la que se produjo la demolición del poblado.

—¿Cómo afrontó todo el proceso?

—Se puso fin a un poblado chabolista en el que llegaron a residir más de 300 personas en condiciones infrahumanas. Durante estos años realizamos un trabajo silencioso, intenso y personalizado para sacarlos de ahí.

—En el 2017 quedaban 35 familias. ¿Qué fue lo más difícil para reubicarlas?

—Desde marzo del 2017 a agosto del 2018 fueron 16 familias. Después, desde que llegamos al gobierno (junio del 2019) hasta marzo del 2021 realojamos a 12 familias. En enero del 2022, cuatro... Así, poco a poco, fuimos haciendo ese trabajo. El tema era hacerlo de una manera lenta, porque había que convencerlos. Son personas que llevaban ahí muchísimos años, con un modo de vida determinado, donde habían sido madres y padres. Esta era una de las preocupaciones que teníamos, los menores. Primero los convencimos de cambiar a una vida diferente a la que ellos conocían. Entonces, se hacía un proyecto de intervención individualizado para cada una de las familias. Se buscaba una vivienda y cuando aceptaban la inclusión en el programa firmábamos el derribo de la chabola a la vez que el contrato de alquiler de la nueva vivienda y el itinerario de intervención. Ellos tenían una serie de obligaciones, cuando había menores se hacía un seguimiento en la escolarización y el bienestar. Con los adultos mantenemos programas de apoyo: desde trámites para obtener prestaciones hasta formaciones para una inserción laboral.

—¿Algún problema en la integración?

—No, tenemos muchas familias realojadas. Seguiremos estando pendientes de ellos y no hay ninguna incidencia. Tampoco la ha habido en el desmantelamiento del poblado. Y no es fácil, pero lo conseguimos.

—Pensando en el futuro, ¿un plazo para abrir el terreno?

—Plazos no puedo dar, porque corresponde al Estado la limpieza de la zona. A partir de ahí, será el momento en el que empecemos a plantear esa senda litoral que recuperamos ahora y ya es factible hacer proyectos sobre ella. Irá de la playa de Oza a la ría de O Burgo para disfrutar de ese borde litoral por la parte de abajo de As Xubias, recuperando un espacio de la ciudad que está infrautilizado porque no se podía y que ahora nos abre una oportunidad.

—Hay dificultades que salvar en el paseo.

—Requiere una tramitación muy larga. Esto es el primer paso para poder pensar en el futuro. Nos toca planificar.

—¿Habrá viviendas en As Xubias?

—Lo que no va a haber es infraviviendas.