Más de 350 vecinos han pedido el cambio al ambulatorio de Acea de Ama

La Voz CULLEREDO / LA VOZ

CULLEREDO

ANGEL MANSO

La asignación de centro pone al descubierto a 50 pacientes que ya no viven en Culleredo

26 abr 2017 . Actualizado a las 05:00 h.

En apenas 48 horas, algo más de 350 vecinos de Culleredo habían solicitado el cambio del nuevo centro de salud de O Portádego, que abrió sus puertas el pasado lunes, a su antiguo punto de atención primaria, situado en Acea de Ama.

Los movimientos de pacientes eran previsibles para la Administración sanitaria, que ya en primera instancia decidió reforzar el ambulatorio antiguo con un nuevo médico en horario de tarde y cupo cero de pacientes para atender las solicitudes de los vecinos que, a pesar de las nuevas instalaciones, decidiesen por proximidad u otros motivos continuar recibiendo asistencia médica en el centro disponible hasta ahora en vez de cambiarse al recién estrenado.

El Concello de Culleredo había reclamado, por el contrario, que se destinasen directamente dos facultativos nuevos y no uno al nuevo ambulatorio, que ha supuesto la incorporación a la plantilla de primaria destinada al municipio de cinco profesionales, entre médicos, enfermeras y matrona.

Con la inauguración del recinto de O Portádego, los vecinos tienen la posibilidad de elegir entre ser atendidos en el nuevo centro o bien en el anterior, insistió el Sergas, de ahí que se esperan más trasvases en la asignación de población para ambos dispositivos.

Hasta ayer, eran 305 adultos y 48 usuarios en edad pediátrica los que ya habían tramitado la solicitud para recibir asistencia sanitaria en el centro de salud de Acea de Ama.

Además, el envío de cartas desde el Sergas también sirvió de recordatorio a algunas personas que, a pesar de figurar asignadas al área de cobertura sanitaria de Culleredo, ya no residen en el municipio, de modo que deben tramitar su nuevo médico en los concellos en los que viven ahora. Así ha sucedido ya en 55 casos, dos de ellos detectados entre la población que acudía al consultorio de Tarrío.