Cerámicas do Castro traslada su punto de venta para liberar el edificio que vende
SADA
El Licsa albergaba, hasta este mes en la planta baja, la galería con la producción
10 abr 2017 . Actualizado a las 05:00 h.Cerámicas do Castro ha ejecutado ya el traslado de su tienda para un edificio más próximo al área de aparcamiento del recinto que tiene en O Castro con el objetivo de liberar el inmueble del Laboratorio de Industria e Comunicación (Licsa) que ha puesto a la venta para mejorar la economía del grupo. Las trabajadoras atienden ya el nuevo punto de venta, que está formado ahora por varios espacios donde se muestran los trabajos que se realizan en Sargadelos y donde, como era habitual en la anterior tienda, se pueden adquirir piezas sueltas a precios rebajados.
El traslado, según se informa en los carteles, se ha producido en este mes, casi a la par que se informó de que el grupo de cerámica había logrado vender el edifico que tenía en la Rúa Nova de Santiago y liquidado así las deudas que las distintas empresas de la firma tenían con los bancos, en una operación que alcanzó los 2,3 millones de euros más intereses. Esto supone un respiro para Sargadelos, que afrontó, hace tres años, un concurso voluntario de acreedores, que superó y se encuentra en estos momentos en un proceso de renovación, tanto de plantilla como de maquinaria, con los que prevé ampliar sus líneas de trabajo.
El edificio de Licsa, de cuatro plantas, con un bajo que ejercía de galería y con una escalera circular que lo hace singular, era uno de los inmuebles proyectados en su día por el complejo industrial y cultural iniciado en 1949 por Isaac Díaz Pardo en Sada.
El Concello de Sada no ha recibido un ofrecimiento directo de venta, pero el alcalde Benito Portela, reconoce que la actual situación no les permitiría abordar, «a día de hoxe», cualquier alternativa que pasase por la compra del inmueble. Lo que sí ha hecho el gobierno local es impulsar acuerdos con Cerámicas do Castro para mantener otras instalaciones del complejo, el primero fue el de la piscina, durante los meses de verano, y recientemente ha propuesto otro para poner en valor el Museo Carlos Maside.